Nostradamus!¡

3.4K 194 29
                                    

Algo pasaba en Francia, algo dentro del palacio real, en los aposentos lejanos de la hija del rey, la enfermedad se estaba brotando y apegando al cuerpo de la real como una enredadera.





No había manera de curarla.




Habían probado de todo y con todo, mandado a llamar a los mejores curanderos y médicos del lugar, huntandole hiervas, haciéndola tomar miél con especias, todo lo que podían intentar no estaba funcionando, y día tras día, la monarca simplemente miraba por la ventana desde su cama, tosiendo y con constantes dolores internos.




Ya no sabían por donde buscar para que pudiera ser curada.




Solo quedaba una cosa por ver, para saber si todo aquél sacrificio y búsqueda había sido en vano o no, saber su futuro.

Era furor por las calles que un hombre de la medicina podía hacer profecías que se cumplían como si un mago las dictara, las voces habían llegado a la corte y a la familia real.


Necesitaban urgentemente la presencia de Michael Nostradamus para saber la salud de la, ahora, débil monarca.


Al contrario de lo que la iglesia decía, de lo que los monjes habían protestado y gritado, la ayuda divina iba y sería necesaria, por aquello, a penas habían encontrado dónde estaba el profeta, una carta había sido mandada.






"Para el señor Michael Nostradamus:

Se solicita su presencia urgente e inmediata en el palacio[...]

Atentamente; La corte real"







Había saltado casi de alegría con la idea de entrar a aquél gran palacio y convivir con la familia real, tenía una curiosidad excéntrica sobre aquél lugar, y no iba a dudar en saciarla.

Con una valija en la mano y sus mejores ropas, el profeta había marchado al palacio real, y, una vez allí, recibido con fergor, admiración y preocupación.




Siendo recibido por los reyes franceses, había hecho una reverencia diplomática.



Podía estar feliz y con ganas de asaltar la cocina, pero no sería así de desalmado frente a los 2 que podrían cortarle la cabeza de un solo respiro.

-Señor Michael...

-Mi reina, mi rey, es un placer verlos, ¿Para que necesitan a este fiel servidor?

-Señor Nostradamus, nuestra hija, enfermó de gravedad...-suspirando, el rey frances se había acomodado en su lugar- probamos de todo, toda clase de medicinas y tratamientos, y nada funciona, pareciera como si la enfermedad se hubiera aferrado a ella.

-Tengo conocimientos medicinales, mi rey, puedo intentar buscar una solución a su enfermedad.

-Eso necesitábamos, pero, las voces nos dijeron que puedes predecir el futuro, hacer profecías que se cumplen al pie de la letra...




Levantando la cabeza con preocupación, los había observado, si lo acusaban de brujería estaba muerto, y todo aquello sería solo una trampa.




-Nuestra hija, iba a casarse con un monarca, con ello, ascender como reina de Francia, pero si está enferma, y sin solución, todo queda en el olvido...queremos saber si nuestros esfuerzos son útiles o si debemos despedirnos de ella.



Era algo duro, la muerte era una amiga natural que visitaba a todos cuando era su tiempo, pero, la muerte de una monarca así de joven iba a dejar un hueco en la familia real y en el palacio, necesitaban saber que hacer en caso de que la visita fuera más temprano de lo que se esperaba.

Mr. Loverman (shuumatsu no valkyrie/RoR one shots)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora