Hermes!¡ 🌙

3.6K 230 34
                                    

La relación entre los dioses y los monarcas era especial, muy, especial, más de lo que se creía, de hecho, en muchas culturas se creía que los que estaban en los tronos eran descendientes e iluminados por los de arriba, equivocados no estaban, no en todo.

Contaba una vieja historia que existía un amor entre una princesa embrujada y un dios que se pasaba la noche cuidandola, y con bastante gusto.

La fecha de Cupido había caído ni mas ni menos que en el corazón del mensajero de los dioses, la deidad de los ladrones y los marginados, Hermes, y lo había fichado con una princesa particular, de un viejo imperio que solo el tiempo supo conocer, un imperio con magia.

MediaLuna, decía la leyenda, era una bella princesa de piel cacao claro, que vestía con sus vestidos de su pueblo hechos a mano con hilos de piedras preciosas, llevaba coronas de flores en el día,y que por la noche, debido al hechizo de una bruja que quería apoderarse del reino y que había fallado, no podía dormir.

Todo el dia estaba en un sueño profundo, y sus horas despierta eran limitadas a la oscuridad de la luna y el cielo oscuro, porque a penas los rayos del sol empezaran a asomarse, caía dormida.

Y ahí iba otra vez, una niebla que se desplazaba como vivora a una de las ventanas del palacio en medio de la noche, no necesitaba invitación para entrar a ningún lugar del reino humano, pero aunque estuvieran dormidos, quería ir directo y rápido con la princesa que hacía su corazón revolotear como una mariposa traviesa.

Ahí, en la gran y mullida cama, se encontraba una figura estirandose con delicadeza entre bostezos, había dormido mucho, y el sueño le faltaba en ese momento, la misma figura se sobresalta levemente al notar una sombra familiar en su ventana.

Volteando, se encontraba otra vez con la dulce mirada de su "amigo", el cuál se acerca, y como era de costumbre, se hinca en una pierna a su lado y toma su mano entre la suya recubierta por un guante blanco perfecto, para besarla con suavidad.

-Mi princesa, que alegría verla en otra espendida noche...¡Oh! -la recibe entre sus brazos cuando se le tira encima para abrazarlo con emoción, como siempre solía hacer.

-¡Hermes! -sonriendo, se acurruca en su cuello- ¡Buenas noches!

-Buenos días serán para tí,¿No, princesa? -riendo, le devuelve el abrazo.

Luego de unos momentos, caminaban por los pasillos del gran palacio, podían estar libremente por allí, nadie los iba a molestar, pues todos estaban dormidos, menos ellos 2, y hablaban de trivialidades varias mientras se acercaban a la puerta, siempre solían ir al bosque cercano a pasear y hablar al aire libre, era agradable, un ambiente íntimo.

-¿En serio tu padre te obligó a hacer eso...?

-Ah, si, fue vergonzoso, Además mi hermano y su esposa estaban viendo, algunas veces ese viejo va a matarme...-ríe suavemente con un suspiro pesado- pero quien sería yo sin él, ¿Cierto?

-Hermes, tú eres más que tu padre, tienes más cualidades y eres un dios importante, incluso más que él, podrá ser el padre del universo y todo lo que me haz contado, pero jamás llegará a ser tú, ni podrá ser como tú. -tomando su brazo para caminar, sonríe- ¡eres incluso más especial que él!

-Princesa...-la miraba, ahora con más ternura, si la vida eterna de ese dios era servir como un sirviente fiel, entonces sería sirviente y devoto de ella- muchas gracias por tus palabras, mi princesa, me alegras el corazón. -tomando su mano otra vez, pasa su brazo por su espalda baja.

Al salir del palacio durmiente, se dirigen al bosque, al espacio que habían bautizado y adoptado para pasar las horas en las que ella estaba despierta, solo con él.

Mr. Loverman (shuumatsu no valkyrie/RoR one shots)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora