¿Seguro que estas solo? -Pregunté, desconfiada.
Shanna y Travis habían salido, pero me habían dejado una nota en el refrigerador que indicaba que, cuando volvieran, tendría que contarles con detalle todo lo que hice desde la noche pasada.
El departamento, a estas alturas de la tarde, no estaba tan helado como de costumbre, pero de todas formas decidí encender la calefacción.
-Seguro, he ido a la lavandería, necesitaba hablar contigo -Camine hacia la cocina para buscar algo para comer. Ya que había desayunado solo un café a eso de las doce del día, mi estomago rugía, y aunque eran las cinco de la tarde, consideraría esto como un almuerzo.
El refrigerador estaba vacío, de nuevo. Bufé, sin importarme que Ash estuviera al otro lado de la linea y cerré la puerta de este. Mire el calendario mensual, en donde salía a quien le tocaba comprar la comida este mes, y me sonrojé al darme cuenta de que yo era la responsable.
-¿Qué sucede? -Tenía claro que era lo que sucedía, y de que quería hablar, pero de todas formas le tuve que preguntar. Gracias a Dios encontré en la despensa unos fideos instantáneos, así que no tuve una mala tarde, después de todo.
-¿Hemos llegado de una entrevista en otra ciudad, esperándonos encontrarnos con Luke y su novia pero, en vez de eso, nos encontramos con su ex en su polera, y preguntas que sucede? -La voz de mi amigo sonaba indignada, pero con cierta gracia. Eché agua hirviendo encima de los fideos y, mientras esperaba que se prepararan, me senté en la mesa de la cocina.
-Me ha ayudado, es solo eso -Respondí mientras mi mirada estaba concentrada en una de mis pantuflas.
-¿Solo eso? -Preguntó. Podía apostar a que su cara, en ese momento, era incriminadora.
-Solo eso.
-Te has ido corriendo, prácticamente en su polera, dejándolo hablando solo -Torcí mi cabeza; Si lo decía así, sonaba bastante mal, de hecho. -No creo que haya pasado solo eso.
-Mira, me ha sacado de quicio, ¿Si? -Estaba algo enojada, no quería ser mala, pero tampoco quería hablar de eso -Ha comenzado a comportarse como un imbécil, y lo he tenido que parar. Eso es todo.
Revise mis fideos y sonreí al ver que estaban listos. Saque un tenedor del mueble y camine con mi cena, un vaso de gaseosa y el celular en las manos. No me pregunten como, solo lo hice.
Me senté, agradeciéndole al cielo por Netflix, y seguí hablando.
-Bueno, como quieras -Al parecer Ash escucho el timbre sonar, pues se calló justo cuando la puerta sonó. Me paré, maldiciendo por el hecho de que mis mejores amigos nunca llevaran llave cuando salen y abrí la puerta.
-Supongo que aún esta en pie la invitación a comer tacos, ¿Verdad?
Mire a mis amigos, quienes cargaban bolsas de supermercado con una sonrisa en el rostro. Supuse que ellos habían recordado lo de los tacos porque, al menos en lo que a mí respecta, se me había olvidado por completo. Mire con un puchero a mi cena actual. Unos fideos en perfecto estado se irían a la basura.
-Claro -Sonreí nerviosa -Claro que esta en pie lo de los tacos, los estamos esperando -Mis amigos pasaron, haciéndome señas para que no olvidara contarles todo lo que había pasado -Y si, claro que Calum preparara la carne. ¿Él es el experto, no?
-Así que sigue siendo un patán... -Travis negó con la cabeza cuando termine de contar la historia, por segunda vez en el día. Shanna sonreía emocionada mientras yo cortaba el queso para ocupar mi cerebro en otra cosa que no fuera pensar en aquello.
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Out Of My Limit II
Fanfiction"El tiempo pasa, las personas cambian, pero no todo se olvida."