A penas el ascensor se abrió sentí la mirada de todas las secretarias del piso sobre mi. Algunas parecían sorprendidas, otras curiosas. Me obligue a sonreír y a caminar con la cabeza en alto, sin titubear ni dudar de mi misma, lo que era bastante difícil con esas chicas escaneandome de pies a cabeza.
Caminé rápidamente hacia la oficina de mi jefa y entré sin tocar la puerta. En cuanto lo hice, toda la confianza y autodeterminación se me fueron. Una de mis cejas se alzó y la sorpresa invadió mi rostro.
-¿Qué haces aquí?
-Elizabeth tenía un brunch, me dejó haciendo algunos papeleos. ¿Qué haces tú aquí?
Sean me observó por un par de segundos.
-¿Sabías que Meredith Cole es la sobrina de Elizabeth?
-¿Que? -Sean me miró como si hubiese perdido la cabeza.
-¿Lo sabías?
-No -el chico rascó su cabeza -es decir, sabía que tenía una sobrina, pero... jamás me dijo su nombre, ni nada, en realidad. Sabes como es ella, no habla de su vida privada. ¿Como...? ¿Quien te ha dicho eso?
Tensé la mandíbula e ignoré su pregunta -¿Estás seguro de que no sabías de esto?
-No, por supuesto que no -exclamó el chico -te lo habría dicho de haber sabido.
Suspiré y centré mi mirada en los castaños ojos del chico. Él se había levantado de su asiento, preocupado.
-¿Y venías a encararla? -preguntó -¿Por eso has entrado tan enojada?
Sean rodeó la mesa en la que estaba trabajando y se apoyó en esta, en frente de mi.
-No, he venido a renunciar -respondí -si es que no estoy despedida aún, claro. ¿No lo estoy, o si?
-No, no lo estas -él se cruzó de brazos -Elizabeth no te despedirá mientras causes drama, es exactamente lo que quiere. ¿Estás segura de que es la tía de Meredith? Demonios, ¿Como no lo noté antes? Todo tiene sentido ahora.
-Yo... -negué con la cabeza -no tengo idea, solo sé que no soporto un día más aquí. Necesito renunciar, necesito...
-No, aguarda -el chico me observó preocupado -tengo una mejor idea.
Alcé una de mis cejas.
-Escucha, si renuncias ahora ella se asegurara de arruinar tu imagen.
-No creo que la pueda arruinar más -hice una mueca.
-Dame un día -el chico se acercó un poco a mi -sé que todo resultó realmente mal entre nosotros dos, pero me agradas, y no quiero que te veas perjudicada. Y sé que Elizabeth se asegura de dañarte de alguna forma. Dame un día y prometo que te encontraré algo mejor, un trabajo, una transferencia, algo.
Me crucé de brazos -de todas formas quiero hablar con ella, es inaceptable, todo lo que ha hecho... todo lo que ha provocado...
-¿Para qué quieres hacer eso? ¿Para desahogarte? -preguntó el chico, compungido -piensalo de esta forma, nadie saldrá ganando si lo haces, habrás arruinado tu carrera.
Tensé la mandíbula, insegura. Entendía el punto del chico, de hecho mi lado racional estaba de acuerdo. Pero el otro quería ir directamente al apartamento de Cruela y gritarle.
Me quedé en silencio por unos segundos, mirando el piso.
-¿Estás seguro de que podrías conseguirme otro trabajo?
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Out Of My Limit II
Fanfiction"El tiempo pasa, las personas cambian, pero no todo se olvida."