Capítulo Cincuenta y Ocho

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Me acabo de dar cuenta de que la pregunta del capítulo anterior ya la había hecho antes así que... lo siento(?). Pero, ¡Eh! Subí dos capitulos en el mismo siglo, los milagros existennnn. 


-Derek me besó.

Mis ojos estaban completamente abiertos, un cabello desordenado caía por sobre mi frente producto de mi rápida escapada del bar de abajo y podía sentir como mis ojos se humedecían. Sin embargo, lo único que me importaba era como la mandíbula de Luke se endurecía.

Había tocado la puerta sin pensarlo dos veces, ni siquiera tomándome el tiempo para planear qué le diría a Luke. Cuando abrió con los chándales puestos, y torso desnudo las palabras salieron de mi boca sin poder frenarlas.

-Me invitó al bar de enfrente, tomamos un par de copas porque yo estaba furiosa y luego se inclinó y... te juro que no le respondí, me alejé de inmediato, el hecho de que otra persona que no fueras tú me besara... vine corriendo porque me siento una idiota. Pero te juro Luke, yo no lo besé de vuelta, yo...

Estaba nerviosa, alterada, e hiperventilada, todo por culpa del alcohol.

Pude ver como Luke caminaba hacia adentro del departamento, a paso firme y decidido, se ponía una capucha y volvía hacia donde estaba parada. Cerró la puerta tras de él y caminó hacía las escaleras. No me miró, no cambió la expresión de su rostro, y desde luego no dijo ni siquiera una palabra.

-¿Luke? -pregunté, con una lágrima corriendo por mi mejilla -¿Luke? ¿Que estas haciendo? ¿Luke?

Bajó las escaleras y, considerando la diferencia de estatura, tuve que saltar varios escalones para alcanzarlo. El alcohol me hacía ver mal, y marearme de vez en cuando. -¿Luke? ¡Luke, vamos!

No fue hasta que noté que Luke se dirigía al bar, que supe lo que sucedería.

-Luke, para. Luke, Luke... -me intenté poner delante de él, pero rápidamente me esquivo. Asumo que al menos eso fue por el alcohol.

Mi respiración comenzó a agitarse mientras veía como Luke buscaba a alguien con la mirada. Cuando ambos vimos a Derek sentado en la barra, todo comenzó a moverse en cámara rápida.

Luke caminó hacía él, Derek ni siquiera notaba su presencia aún. De un momento a otro cruzaron miradas, Derek notó mi presencia y, algo resignado se levantó de su asiento.

-Eh, amigo -habló -lo siento, fue algo...

Luke no dejó que terminara, simplemente lo golpeó. La mayor parte del bar quedó en silencio, ellos eran el centro de atención. Me acerqué, intentando ignorar el mareo.

-Bien, me merecía eso... -Derek volvió a hablar pero Luke no lo dejó terminar.

Esta vez el golpe de Luke hizo que Derek se desequilibró y, finalmente cayera al suelo.

-Eh -el chico que estaba atendiendo tras la barra intentó tranquilizarlos y, aunque después de que Derek cayera al suelo Luke pareció haberse calmado, los golpes siguieron y siguieron. Derek, esta vez, intentó defenderse.

-¡Basta! -alegué. -¡Luke! ¡Detente!

Toqué el hombro de Luke en un intento desesperado por que se calmara, aunque la mayoría de las personas dicen que eso es una mala idea, que un hombre peleando con otro hombre no puede ser detenido por nada ni por nadie. Luke, después de golpear una vez más al chico en la cara me miró. Y aunque al principio interpreté su mirada como enojo puro, me dí cuenta que había algo más; dolor.

Luke tenía dos marcas rojas en la cara que, de seguro, tomarían un color amoratado en un par de horas. Derek, por otro lado, tenía roto el labio.

Out Of My Limit IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora