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Trevor

La mirada que tenía su madre mientras se acercaba a él confirmaba que no le iba a dar noticias buenas.

--¿Qué te dijeron? -- preguntó.

--Amor, ellos me dijeron que eran pareja -- el corazón del omega se paralizó para después sentir un nudo en su garganta.

La omega se acercó a abrazarlo, sintiendo como su hijo estaba derramando lágrimas.

--Shh, amor, tranquilo -- el omega empezó a hipar -- ¿Quieres que te traiga algo? ¿Un te? ¿Qué deseas?

--Quiero irme a casa...por favor.

Su madre asintió, para después agarrar sus cosas y partir con Trevor hacia el estacionamiento.

El omega tenía la cara bañada en lágrimas, solo atinó a sentarse de copiloto y seguir llorando, mientras su madre se abrochaba el cinturón y encendía el auto.

--Hablaremos en casa, ¿Si?

Trevor asintió, empezando a formarse un montón de imágenes en su cabeza, cada una de ellas lo hacía llorar.

Y es que, había decidido salir con su madre, después de estarse lamentando en su casa debido a lo que estaba sucediendo con Thomas.

Lo que no esperó fue encontrarse al omega con un alfa, sonrientes y agarrados de la mano.

Trató de inventarse mil excusas para no pensar en lo que a simple vista parecía obvio.

Pero no pudo evitar aprovechar que a su novio se le había caído la cartera para  pedirle a su madre que la recogiera y de paso le preguntarán si eran pareja.

¿Por qué?

Porque en este momento tenía demasiadas dudas, más de las que tenía desde que fue a la casa de Thomas, y su corazón dolía, pero no encontraba explicación a lo que acababa de suceder.

Hipó una vez más, volviendo a soltar lágrimas.

El amor dolía mucho.

Él no le hacía daño a nadie, él no lastimaba a nadie, solo se había enamorado de un omega, ¿Por qué estaba sucediendo esto entonces?

¿Por qué sentía su pecho arder y su estómago en un vacío que le hacía querer llorar cada vez más?

¿Por qué?

(...)

Oliver

-- ¿Quieres algo de comer? -- preguntó el omega después de que ambos ingresaron a la casa del pelirrojo.

Leonard negó.

--¿Tu quieres algo? -- preguntó a Oliver.

Este asintió.

--Tengo hambre, me prepararé un sanduche.

--Si quieres te lo puedo preparar yo. -- ofreció el alfa.

Oliver dió un suspiro y asintió.

--Por favor.

Dicho esto, procedió a sentarse en el sillón mientras el alfa se acercaba a la cocina y sacaba los ingredientes necesarios, pan, jamón, queso, tomate y mayonesa.

--¿Lo quieres con nutella? -- preguntó divertido.

El omega rio un poco.

--No, esta vez no tengo antojo.

Leonard asintió y empezó a armar el sanduche, esto mientras Oliver miraba fijamente a un punto de la pared de su casa.

Su mente llena de pensamientos.

Coincidencia - OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora