Fred y George y las hermanas Black

Capítulo 53

Narra Julia

Me levanté temprano, con Oliver a mi lado. Bajamos a desayunar como siempre, con la diferencia de que Meridiem hablaba con Charlie. Nos sentamos nosotros solos, hasta que empezaron a bajar todos para desayunar. Al cabo de varios minutos, Ila empezó a gritar a alguien.

-¡No me toques!... ¡No! ¡Déjame en paz! ¡Lárgate de aquí!... ¡No te voy a escuchar, imbécil, fuera de mi casa!

Apareció en el salón con Percy detrás, intentando hablarle. ¿Qué había pasado? Percy la cogió de las muñecas y la sacudió varias veces.

-¡Escúchame!

-¡No!-Ila se libró del agarre de Percy y le dio un bofetón.

El pelirrojo la aprisionó cogiéndola de la cintura y la tiró al sofá.

-¡Escúchame de una vez! Lo siento. No te pido otra oportunidad ni que me perdones, solo que sepas que lo siento, Ila...-se colocó bien la camisa.

-Fuera de mi casa. Y no, ni oportunidad ni perdón, Percy. ¡Lárgate de aquí!-Percy asintió y se desapareció.

-¿Qué ha pasado, Ila?-preguntó Sirius. 

-Es un idiota, en sus preferencias va antes el Ministerio que yo-dijo Ila, acostándose en el sillón.

-Nos ha hecho lo mimo, tranquila-dijo Molly.

-No debería hacerlo. Al fin y al cabo, es tu ex-novio y su hijo, señora Weasley-dije.

-Hazle entrar en razón-comentó Bill.

-No me tientes...

Después de un rato, Meridiem y nos quedamos solas. Empezamos a hablar, le demostré un poco lo que podía hacer, y le pregunté de nuevo.

-¿Qué sabes hacer tú?

-No quieras saberlo-asentí frenéticamente- Vale...-suspiró- Soy capaz de contrarrestar la muerte con solo tocar a alguien, de la misma manera que puedo asesinarle. 

-Por eso no tocas a nadie...-ella asintió- Es un don muy chulo, la verdad. 

-Imagina que no puedas tocar a quien quieres, porque hay riesgo de que le mates... No es muy bueno, la verdad... Desde que desarrollé este don, no he tocado a nadie... Pero te acabas acostumbrando-sonrió. 

-Entonces, ¿no puedes tocar a Charlie?-ella negó- ¿De ninguna manera?-asintió- ¿No sabes como es tocar su piel?-ella negó.

-Ni su piel, ni su cara, ni sus manos... Nada. Pero es una buena arma defensiva-sonrió.

En ese momento, Regulus bajó. 

-Hola... Esto, yo... Bueno, quería hablar contigo, Sur (Meridiem). ¿Puedo?-ella asintió y yo me levanté para irme.

No miré a Regulus. No es que no me cayera bien, solo que no me daba muy buena espina. Al fin y al cabo, fue un mortífago, aunque haya traicionado a Voldemort. Subí, para encontrarme con Fred, George y Kiara sentados en la mesa, cuchicheando algo.

-¿Qué hacéis?-pregunté.

-¡Julia! Necesitaremos tu ayuda-dijo Kiara.

-Tú eres la mejor maga...-añadió George.

-Tanto con hechizos como con pociones...-continuó Fred.

-Así que te necesitamos-acabó Kiara.

-De todas maneras, eres de los nuestros, Julia...-añadieron los gemelos a la vez.

Me senté al lado de Fred, ya que George y Kiara estaban sentados juntos.

-¿Qué necesitáis, pajaritos?-pregunté.

-Una poción especias...

Me contaron todo su plan. Me sentía la mayor, aunque en edad eran los gemelos. Pero en estatura era yo. Subimos al ático, aunque Buckbeack estaba allí. Nos dispusimos a empezar las pociones, mientras el hipogrifo miraba. Cuando acabamos, la señora Weasley había mandado a Sirius y a Ginny a limpiar aquí, pero nosotros habíamos dejado la puerta bien cerrada. Después de unas horas, bajamos a comer. Molly regañó a los gemelos por "desaparecer" tanto tiempo. Yo miraba a Meridiem. Pobrecita, no me imaginaba como sería no poder tocar a Oliver, o a George... 

-Julia, querida, ¿puedes ir a llamar a Ila y a los Wood?-me preguntó Molly.

Asentí y subí las escaleras. Toqué en la puerta de los Wood y les dije que bajaran. Luego fui a por Ila. Toqué la puerta, y la vi, sentada en la cama, con un cigarrillo encendido en la mano, soltando el humo del cigarro y con un cenicero y una cerveza muggle a su lado. 

-A comer-le dije y bajé. 

Me senté entre Oliver y George y empezamos a comer. Noté que alguien no me quitaba el ojo de encima. Miré disimuladamente en la dirección por la que me miraban, y vi a Regulus, con los ojos entornados mirando hacia mí. Me levanté, dejé mi plato, cogí el skate y me fui a dar un paseo. Oliver me siguió y caminamos un rato mientras le contaba lo de Regulus. 

*-*-*

¡Hola! Lo sé, lo sé, llevo un buen sin subir, pero es que he estado malita :( Pero ya estoy bien, y eso es lo importante! :D Espero que os guste! Besos

¡Chao! <3