Fred y George y las hermanas Black

Capítulo 28

-Yo... George, claro quiero-dijo Julia.

Se abalanzó a él para llenarlo de besos. Ginny entró.

-A comer-dijo y salió de la habitación.

George y Julia salieron cogidos de la mano y se sentaron con el resto a comer. Se lanzaban miradas que pasaban desapercibidas por sus acompañantes. Fred y Kiara, cuyo romance era secreto, estaban cogidos de la mano por debajo de la mesa, y se daban apretones suaves de vez en cuando. Cuando comieron y salieron de allí para ir a ver el partido. Julia parecía un poco deprimida. Subieron y miraron el partido. Todos estaban muy animados, y cuando empezó el partido, empezó a animarse. Volvieron a su caseta y se sentaron en el sillón, riendo por las tonterías de los gemelos. Se habían puesto a bailar. Julia se había quedado fuera.

-Victor Krum es el mejor-aseguró Ron- Atraviesa el aire como un pájaro.

-Creo que estás enamorado, Ron-dijo Ginny.

En ese momento todos se pusieron a cantar mientras el señor Weasley salía ya que había escuchado algo.

-Tenemos que irnos ahora-dijo entrando pálido.

-¿Porqué?-preguntó George.

-Mortífagos-dicho esto todos salieron de allí lo más rápido que pudieron.

-¿Y Julia? ¿Dónde está?-dijo Bill.

-No lo sé. Fred, George, haceos cargo de Ginny. Ron, Hermione, Harry, no os separéis de los chicos. Bill, ve a buscar a Julia-el señor Weasley dijo esto y todos hicieron ademán de irse, menos George y Kiara- La encontraremos, ahora corred.

Las cosas explotaban y se quemaban. Bill fue por un lado,y el señor Weasley por otro para ayudar a la gente a escapar. Julia había sacado su varita, era importante y la necesitaba. Una maldición pasó rozando la cabeza de Fred. Ellos lanzaban se limitaban a defenderse y ahorcar los mortífagos que podían. Julia vio a Bill ayudando a alguien a salir de su tienda, y a un mortífago apuntarle.

-¡Expulso!-gritó, y el mortífago salió disparado hacia detrás. 

Bill la miró, y sacó a una mujer y la juntó con el resto de la gente. Luego volvió a por Julia, que tenía un corte en la mejilla.

-¿Y Kiara?-le preguntó a Bill, o más bien gritó, ya que casi no se oía con los gritos y explosiones.

Julia miró a su alrededor.

-¡Allí! ¡Kiara!

Ella miró y desvió los ojos, apuntó y gritó.

-¡Expulso!

Un mortífago salió volando detrás de Julia y Bill. Kiara se acercó corriendo a su hermana y a su amigo y se fueron de allí lo más rápido que les permitieron sus piernas. Al llegar al traslador, vieron que no estaba.

-Deben haberse ido...-dijo Bill.

Kiara estaba sentada y se frotaba la pierna. Sus pantalones tenían sangre en la pierna y estaban rajados. 

-¿Y que hacemos?-preguntó ella, levantándose del suelo.

-Puedo aparecerme-comentó Bill.

Las hermanas se acercaron y se agarraron una a cada brazo de él. En un segundo estaban en la Madriguera. Los Weasley esperaban en la entrada. Siguieron caminando hasta que Molly gritó.

-¡Ahí! ¿Estáis bien? Kiara, Julia, estábamos preocupados por vosotras-dijo la señora Weasley.

-Oh, sí, estoy muy bien. Gracias mamá-dijo Bill, irónicamente.