Betty lo miro y sus ojos se cristalizaron. —Entiendo lo que pasa, tú ya no me deseas como antes— Dijo, queriendo llorar.
—¿Qué? Amor, no, no, no es eso preciosa. No llores, mírame— Pidió, tomando su rostro entre sus manos. —Te aseguro que no hay nada que quiera más en este momento que follarte, hacerte mía, mi amor. Pero... hay algo que me interesa mas y eso es tu salud y la de nuestro bebé. Tu mejor que nadie sabe que ahora mismo tu salud y la del bebé están en juego—
—Lo se y amo que te preocupes así, pero no creo que me valla a pasar nada si tenemos sexo ahora mismo aquí en tu auto. Solo un poquito, un ratito, por favor— Suplico.
Jughead suspiro, mirándola de arriba a abajo, ella encima de él; Esa imagen lo excitaba demasiado y ya el calor empezaba a levantar algo entre sus pantalones.
—De acuerdo, pero si en algún momento estas incomoda, tu avísame y me voy a detener de inmediato. ¿De acuerdo? — Pregunto, mirándola fijamente.
—Esta bien— Acepto.
El la beso, tomando su rostro entre sus manos, y ella le siguió el beso hasta que después de devorar su boca, el bajo esos besos mortales a su cuello, haciendo que ella sintiera un escalofrío en todo su cuerpo y empezara a jadear.
Ellos no habían tenido acción en los últimos días y estaban disfrutando el poder explorar sus cuerpos y disfrutarse, saborearse una vez más. El le quito la remera para besar la parte superior de sus pechos mientras ella le desabrochaba la camisa y pasaba sus pequeñas y suaves manos por su abdomen sexy y bien marcado de deportista.
El volvió a su boca y sus lenguas se unieron en una danza perfecta, sincronizada y delicada, pero no fue así por mucho tiempo; Empezaron a besarse con una agresividad que les hizo perder el aliento. Se separaron para tomar aire un momento y volver a besarse mientras Betty bajaba sus manos a los pantalones del chico, sintiendo ese enorme bulto que tenía ahí ya formado ahí abajo.
Ella le desabrocho el pantalón y saco su miembro, y el le bajo los shorts que ella tenía puestos y también las bragas, encontrándose con su feminidad y penetrándola, empujando contra ella mientras sus gemidos empezaban a llenar el auto.
Ella empezó a saltar sobre el mientras el la penetraba y la llenaba de placer, sintiendo como desaparecía en la calidez de su interior, sintiendo como ella saltaba y saltaba sobre él, desesperada, loca del placer, y el llegaba cada vez mas alto con ella hasta que en un momento no pudieron mas y en unos cuantos saltos y gemidos profundos, el termino corriéndose con ella, soltándolo todo en su interior mientras ella iba bajando de su clímax.
Cuando regularon un poco sus respiraciones, se miraron directo a los ojos y rieron.
—Me encantas tanto, bebé... te amo— Dijo Jughead, llenándole la cara de besos a su novia.
Betty rio y dejo un pequeño beso sobre los labios del chico. —Te amo, Juggie. Ayúdame a ponerme esto— Pidió, tomando su remera y pasándosela a su novio.
Ambos lo habían disfrutado mucho, aunque fue algo breve; Se acomodaron la ropa nuevamente para aparentar que no había pasado nada, pero se quedaron en silencio en aquel auto. Cuando Betty se iba a casa, a ellos les tocaba estar separados y era algo que no les gustaba mucho.
Jughead aclaro su garganta, mirando a Betty. —Mi vida... he estado pensando en estos últimos días y tengo una propuesta para hacerte—
—Te escucho— Contesto Betty, mirándolo con mucha atención.
—Amor... en las noches no puedo dormir teniéndote lejos sin saber si podrías estar necesitándome o como estarás pasando el embarazo. Siento la necesidad de estar asegurándome de que estes tomándote tus pastillas o que te estes cuidando como debes— Admitió Jughead, posando una mano en su mejilla.
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•Mi Corazón Es Tuyo•
FanfictionCuando te conocí, entonces mi vida tuvo sentido, y eso que le da sentido a mi vida eres tú