pucheros |taekook omegaverse|

#120.

—Cuando un Alfa y un Omega se quieren mucho pasa que-

—¡No! —el grito aterrorizado de Taehyung retumba dentro del auto.

Debimos saber que nos acorralarían de esta forma en el viaje de regreso a Seúl.

Trago saliva, buscando mojar mi garganta seca.

¿Nos van a dar la plática? Por Dios.

Ya sé lo que es el sexo. No queda de más mencionar que he practicado ese acto. Todo esto es incomodo, pero vamos, nos lo hemos ganado. Lo tenemos merecido. Ni siquiera me siento ofendido de que nos quieran platicar sobre ello.

Se nos pilló después de darnos un acalorado beso. Lo más probable es que sus mentes hayan hecho especulaciones apresuradas porque pues, Taehyung y yo siempre estamos solos. Durante horas. A solas. Hacemos pijamadas —bueno, de eso ya ha pasado un rato—.

Pero ¡Santa Luna!, jamás pasa nada de más. El solo pensarlo me pone rojo como un tomate.

Yo.... No había pensado de Tae de esa forma. No hasta ahora. Y estoy evitando que mi mente haga escenarios comprometedores, pero no puedo porque el señor Kim ya está hablando.

—Escuchen, niños, ustedes saben lo que es... tener sexo, vaya. Son jóvenes. No quisiera que pasara algo precipitado.

—Papá, para. —Tae está arrugando la nariz. —Por favor.

Sus ojos se posicionan sobre mi. Parece desesperado, como si esperara que dijera algo.

—No, Taehyung. Tienen que escuchar. Solo la Luna sabe lo que se pasan haciendo cuando están solos.

Gimoteo de vergüenza. Cierro los ojos.

—Es que no pasa nada. Somos mejores amigos. —ah, la vieja confiable 'Mejores amigos.' —Que mal que no nos tengas confianza, papá.

Por suerte, Jihun no está agregando nada a la conversación. Solo es un constante intercambio de oraciones entre el señor Kim y su hijo.

Y es que no sé que decir o como comenzar.

—Los mejores amigos no se besan. —el Alfa mayor afirma.

Abro los ojos para solo observar como Tae pone en blanco los suyos.

—¿Cómo no? Es la moda.

Le doy un golpe en el hombro. No está arreglando nada. Me temo que tengo que tomar palabra.

Carraspeo la garganta.

—Uhm... yo.... —el señor Kim alcanza a observarme a través del retrovisor. Me pongo nervioso. —Lo que pasa es que...

Bueno, hay que ser honestos, ¿no?
Estoy apunto de abrir la boca, pero él se adelanta.

—Jungkook, siento mucho preguntar esto pero... ¿utilizas métodos anticonceptivos?

Abro bien los ojos. Ahora si estoy escandalizado. Taehyung, a mi lado, se tiene que aguantar la risa.

—¿Qué? ¡N-No! —efectivamente luzco como un brillante tomate rojo. —No porque ni siquiera estoy...estamos haciendo eso. ¡Tae y yo somos mejores amigos!

—Los mejores amigos no se besan. —el señor Kim y el mismo Taehyung afirman al mismo tiempo.

Ahora es mi turno de poner los ojos en blanco.

La conversación no está yendo muy bien. Probablemente sea la forma en la que el señor Kim la ha comenzado. Puedo notar lo nervioso que está también. Taehyung es su único hijo. Tal vez se haya preparado mil veces para dar la plática, y ahora que por fin está sucediendo, tiene la cabeza hecha un lío.

A pesar de que esto me tenga ansioso, también me resulta lindo y atento. Es como todo padre tendría que ser. Es reconfortante como el señor Kim se está esforzando por 'educarnos'.

Mamá jamás lo hizo conmigo, por eso tuve un ataque de pánico después de tener sexo por primera vez. No condón de por medio. Pastilla del día siguiente después. Incluso me hice dos pruebas de embarazo porque estaba muy nervioso.

—Pero, como decía... Tae y yo solo hemos compartido besitos. Nada fuera de lo normal. —me lleno de valor. Lleno mis pulmones de aire. Tengo la mirada sobre mis manos. —Estamos averiguándonos... no hemos platicado formalmente sobre ello. La verdad es que nos queremos mucho. Igual, queremos hacer las cosas bien, pero a pesar de todo, seguimos siendo un par de bobos.