Capitulo 74

10 4 0
                                    

Este lugar es simplemente espectacular, después de una hora de camino por fin llegamos a nuestro destino y me quede sin palabras ante lo que veía.

Estamos ni nada más, ni nada menos que en Boracay, Filipinas, una hermosa isla que tiene un número muy reducido de visitantes y pues como quería que estuviéramos solos pues pedí que no hubieran más personas más que nosotros y vaya cantidad de dinero tuve que pagar pero lo vale.

En cuanto entramos en la camioneta Crina cayó en un profundo sueño y en todo el trayecto no se levantó ni por un minuto, y cuando llegamos tampoco quise despertarla así que la saqué con cuidado de la camioneta y la lleve cargada hasta la  habitación principal para dejar que descansara.

Y en lo que esperaba que se despertara me puse en orden con mis pendientes, comencé haciendo la dichosa junta con los alemanes y no fue nada bueno.

Reunión de Sky

— Hallo meine Herren, ich hoffe, es geht Ihnen gut — y solo puedo ver como todos me ven con cara de fastidio.

— Cameron ist gut, von dir zu hören, nachdem du morgens auf dich gewartet hast und du dich nicht vorgestellt hast — y aquí vamos con el reproche.

— Ich entschuldige mich für die Unannehmlichkeiten, aber wie meine Sekretärin sie bereits informiert hat, sind wir an dem Ort interessiert — no tengo por qué darles explicaciones.

— Nun, wir haben eine Erklärung für deine Abwesenheit erwartet, um ehrlich zu sein Hill — como odio a este tipo.

— Hallo Marvin, es ist eine Freude, dich wieder zu begrüßen — un saludo bastante hipócrita y sarcástico de mi parte.

— Ein Vergnügen wieder Cameron, zurück zur Arbeit Ich hoffe, wenn der Bau des Gebäudes beginnt, wenn Sie zur Überwachung zur Verfügung stehen — Su falsa modestia me irrita.

Y así siguió toda la tarde hasta que por fin nos pusimos de acuerdo para firmar la compra del terreno y para fijar la fecha para iniciar la construcción del edificio.

No me percaté del tiempo que pasé en esa junta pero se que fueron más de 3 largas y fastidiosas horas, y cuando por fin pude liberarme de ellos volví a la realidad y decidí salir a buscar a mi chica para ver si ya había despertado.

Al llegar a la habitación no veo a nadie en la cama, instantáneamente pienso que estará en el baño así que me acerco a revisar y tampoco está ahí, los nervios se hacen presentes y mi instinto de protección se activa al 100%.

Salgo como loco de la habitación buscándola por todas las puertas que me encuentro y nada, es sino hasta que llego a la parte de la cocina donde la veo bastante concentrada cocinando y parece que me devuelven el alma.

Me acerco sin llamar mucho su atención, me acerco por detrás y la sujeto de la cintura provocando que se asuste y yo todavía con mi afán de provocar sus nervios me acerco a su oreja para susurrarle.

— ¿Sabes que me tenías muy preocupado? — puedo sentir como se tensa.

— ¿Así?

— Si, no es de muy buena educación no acercarte a saludar o avisar donde vas a estar

— Lo iba hacer pero estabas bastante ocupado con tus socios que no quise interrumpir — eso no es justificación o por lo menos no para mi.

— Eso no te justifica Crina, estaba como loco buscándote por toda la casa, la cocina fue el lugar donde menos pensaba que te iba a encontrar.

— Cameron, no estoy intentando justificarme pero de verdad que entiendo lo complicado que pueden resultar esas reuniones y preferí no molestarte, y sobre lo de buscarme al parecer para ser investigador privado no lo haces muy bien — se gira y me toma de los brazos.

By following your rulesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora