El camino de un héroe

69- Última noche en Tuplan

Daniel, Erick y Lewis se encontraban en una de las tiendas de comida, ya habían pasado por tres anteriormente.

—Dime... ¿De verdad es necesario ir por una cuarta ronda?

Preguntó Erick comenzando a sentir su estómago pesado, mientras que Daniel y Lewis parecían estar bien a pesar de haber comido tanto en tan poco tiempo.

—¡Por supuesto! ¿No es bueno probar nuevos sabores? Deberías aprender de Lewis, tiene un estómago de acero, ¿No es así?

Lewis solo asintió, mientras se servía un guiso especial de ese reino, todavía faltaban algunos platillos para acabar esa tienda y Daniel se veía tan fresco como una lechuga.

—¿Será que te dicen tarro sin fondo?

Preguntó Erick comenzando a sentir algunas náuseas, había comido tanto, que el aroma a comida que salía del restaurante comenzaba a hacerle sentir mal.

—¡Maestro! ¡¿Me daría estas tres especialidades más por favor?!

—¡Por supuesto!

Daniel había pedido tres platos más de comida, no tardaron nada en colocar la nueva comida sobre la mesa, en donde había más frituras y otras especias.

Luego la puerta se abrió, dejando entrar a otro cliente, luego Erick sintió como alguien se había sentado a un lado de él. Al voltearse a ver, se dio cuenta que era Eli.

—¿Cómo se atreven a comer sin invitar? ¿No les enseñaron modales?

Eli arrebató el palto sin terminar que Erick tenía y comenzó a comérselo.

—Si te fuiste apenas avisando, ¿Cómo podíamos invitarte?

Refutó Lewis mientras volvía a servirse otro plato más de comida.

—Pero ya estoy aquí, por cierto, esta comida está bastante buena, ¿Por qué no estás comiendo Erick?

Erick con su cabeza apoyada en la mesa, le vio con ojos sin vida, mientras parte de su boca seguía grasosa.

—No puedo Eli, si como algo más, voy a expulsar todo.

Sus ojos estaban casi llorosos pidiendo ayuda, Eli no pudo evitar reírse a carcajadas al ver el estado de Erick.

—Tú pareces tolerar bien la comida al igual que Lewis, ¿Te parece si hacemos una competencia de comida?

Comentó Daniel con confianza, mientras miraba de nuevo el menú de la carta, para pedir algo más.

—Acepto el reto, el perdedor pagará todo.

Contestó Eli con confianza, mientras sujetaba un tenedor, Daniel pidió dos platos extra grandes de fideos orientales con huevo, cebollín y mucha chuleta. Erick cambió a un tono blanco al ver como Daniel a pesar de ser humano, todavía tenía espacio para comer algo más.

Siguieron los cuatro en ese lugar, mientras la atención se centraba en Daniel y Eli, por ver quién comía esos grandes paltos más rápido.

Como Lewis pensó, Eli había salido ganando y Daniel tuvo que pagar por completo toda la comida consumida.

Al salir del lugar, Erick se fue corriendo hacia un lado del restaurante y no aguantó más, tuvo que vomitar parte de lo que había comido, su digestión no toleraba esa cantidad de comida.

Eli le ayudó golpeando un poco su espalda mientras lo consolaba con una sonrisa burlona, mientras que Daniel y Lewis estaban un poco más alejados.

—Tu amigo inesperadamente sabe disfrutar bien de la comida, hasta está ayudando a Erick en algo tan desagradable, ¿Es más buena gente de lo que imaginé?