El camino de un héroe

74- Despertar siniestro(4)

Elliot observó sorprendido hacia atrás, habían llegado refuerzos, pero atacaron sin avisar.

"¡Mierda! ¡Lo hicieron peor!".

El último hilo de raciocinio que le quedaba a Eli se cortó, una fuerte ráfaga de maná oscuro la cubrió por completo y se fue haciendo cada vez más grande, los chicos que estaban en el lugar tuvieron que retroceder de inmediato, a excepción de Lewis, que se había quedado ahí.

—Eli...

En frente de él, ya no estaba Eli, estaba un lobo de varios metros de altura, nunca la había visto tomar una forma tan grande. Cuando Jess vio que ya no había nadie cerca de Eli, con toda su fuerza lanzó la esfera que Eli le había dado antes, pero Eli se percató de eso y usando su maná, desvió el trayecto de la esfera.

El santo se horrorizó cuando hizo contacto visual con semejante bestia, su cuerpo empezó a temblar, pero trató de estar lo más firme posible. Como santo, no debía dejarse llevar.

Agarró su collar, el cual era el trozo de núcleo de Lewis.

"Está bien, mis poderes están amplificados por este cristal".

—¡Todos, tomen posición defensiva, los arqueros ataquen desde atrás, nosotros haremos una barrera desde afuera!

El ahora lobo negro, se quedó de pie y abrió el hocico, frente a él, se estaba formando una cantidad aterradora de maná oscuro. La dirección era hacia los sacerdotes que le estaban estorbando, pero detrás de ellos, muchos kilómetros hacia atrás, se podía ver el templo.

Luego que estuvo listo, el lobo atacó liberó esa gran cantidad de poder hacia ellos.

"¡Esa barrera no es suficiente!".

Elliot desde atrás levantó un fuerte muro de hielo en frente de ellos, lo que dejó a los arqueros sin lugar para atacar. Ya que el santo estaba al tanto del poder de hielo de Elliot, cambió las instrucciones al ver que estaba siendo protegido.

—¡Este es el poder de hielo eterno del príncipe del imperio de Altair! ¡Debemos inyectarle nuestro poder divino para que resista!

Todos estuvieron de acuerdo y desviaron su poder divino hacia el hielo, haciendo que resistiera más. Pero aún así, Eli siguió liberando esa energía continuamente, logrando hacer que el hielo comenzara a ceder.

—¡Salgan de ese lugar maldita sea! ¡El hielo no va a resistir mucho!

Gritó Daniel observando como todos en ese lugar iban a ser asesinados si no se quitaban. Las capaz de hielo estaban siendo rebasadas y Elliot intentó fortalecerlo agregando más y más capas de hielo.

—¡Háganse a un lado!

Gritó el santo, mientras todos hicieron caso y apresuradamente salieron de ese lugar. El hielo no resistió mucho más y toda esa energía salió disparada derecho hacia el templo.

Todos sorprendidos, vieron como ese cúmulo de energía concentrada estaba yendo a ese lugar. Apenas impactó en frente del templo, no solo hizo que el templo se desintegrara por completo, una cuarta parte de la capital cayó en una explosión, matando a miles de ciudadanos en menos de un segundo.

La explosión fue tal, que tuvo una gran onda expansiva, incluso llegando un fuerte viento hacia ellos.

"Este... es el poder que Eli acumuló por tantos años en el inframundo, es tan devastador".

Pensó Erick casi en shock al ver como con un solo ataque había desaparecido cientos de hectáreas.

—Elliot, debes retener a Eli con el hielo, recibí una esfera de ella y dijo que se la lanzara si llegaba a este estado.