Malos Entendidos

Propuesta aún no propuesta -35-

No es extraño cuando te preocupan las situaciones que hueles venir, lo extraño sería no tener un plan para enfrentarlas...

Es extraño darme cuenta que es la primera vez que hablo sobre mis problemas con alguien que no sea Ángel.

En ese café tan chiquito y discreto desahogué mis penas con mi amiga Libe.

-¿Estoy mal?-.

-No amiga, claro que no-, me consoló, -yo también creo que no hay que darles todo, porque al final, ¿qué mas podríamos ofrecerles? Si ya lo vieron, sintieron y vivieron todo contigo...-

-¿verdad que sí?- interrumpí, - ¿por qué habrían de pensar en casarse si ya te tienen a su lado?-.

-Exacto, tu probabilidad se reduce, pero ¿sabes?, me parece que tendrías que aclarar bien ese punto con él, porque si no piensa o no cree en el matrimonio y tú si, y vives esperando la propuesta... ¡Amiga!- negó con la cabeza en señal de desaprobación, mientras sorbía un poco de su café espumoso.

-Lo sé, pero yo no lo puedo obligar, además, no es algo necesario en este momento-. Agregué.

-No, no es necesario, obvio no, pero el tiempo pasa hermosa, y si él no piensa nunca dar el siguiente paso, sería un poquito injusto para ti, ¿no lo crees?-.

-No lo sé amiga, lo amo, no puedo, no quiero ni pensar en no verme con él en mi futuro, pero si solo me voy a vivir con él para complacerlo... creo que no es algo seguro, siento que es como si siguiera siendo su novia. Bueno, de hecho seguiría siendo su novia- dije triste.

-Piénsalo amiga, porque si realmente ya se le metió la idea en la cabeza de que quiere que vivan juntos, vas a tener que pensar cómo decirle que no es lo que deseas, sin presionarle, ni chantajearlo con que te dé primero el anillo-.

-¿Anillo?-, no aún no tenía deseos de casarme, para nada, en unos años...

En unos años, primero quería vivir la relación, tenía que sacarle el máximo al noviazgo, que dicen es la mejor etapa.

¿Matrimonio? No, no pensaba en eso y mucho menos me veía casada tan joven.

Tenía proyectos por delante, terminar mi escuela, hacer una maestría, trabajar. Hasta entonces, solo hasta entonces, debía preocuparme si mi Jos no daba señal alguna de querer pasar su vida a mi lado.

Por ahora solo debía preocuparme cómo, en caso de que me propusiera vivir juntos, cómo sacarle esa idea de su cabecita sin lastimarlo, y hacerle entender, más bien que trate de comprenderme que no es lo que deseo como futuro próximo.

Estar con él, vivir con él, despertar juntos hacía que el futuro, mi futuro fuera soñar con la perfección.

Pero sólo eso: En Un Futuro.

Hoy no, ni mañana, ni en un año, al menos.

Describí a la perfección mis no prontos deseos de vivir con mi Jos.

Y sabía a la perfección el gran poder de convencimiento que ejercía sobre mí. Por algunos instantes me hacía dudar, claro que deseaba estar con él, pero si lo hacía temía las consecuencias de ello.

Sentí que saqué bastante de mis sentimientos y que al dejarlos plasmados y expuestos en mi blog de Internet, fueron suficientes para respirar y saber enfrentar a mi novio, en caso de que me lo propusiera.

El timbre de mi celular logró que mi corazón diera un fuerte vuelco.

Pero no era mi Jos.

-Hola Ángel-

-Hola-

-¿Qué tienes?-

-Tengo... de hecho no tengo nada-

-¿Cómo?-

-Sí, no tengo la exclusiva, acabo de leer tu blog- se rió.

-Hermoso, perdóname, pero esta vez necesitaba consejos de una mujer-

-Lo sé, estoy bromeando, pero quiero que sepas que concuerdo con tu forma de pensar-

Hablé con mi amigo un gran rato y como era de esperarse me entendió a la perfección.

Mi amigo Ángel sí, pero ¿y mi Jos?. Temía en el fondo de mi corazón que un rechazo a una propuesta en el aire, a una propuesta aún no propuesta lo alejara de mi, que un NO a una idea, a un miedo con fundamentos, comenzara a abrir huecos en mi sólida relación.

Pero, ¿por qué me preocupo? Si aún no me propone nada.

........

Gracias por leerme.

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