Capítulo 118

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Esa misma tarde Christopher hacía aparición en aquel cuarto de hospital. Aprovechando que su madre y sus hermanas habían bajado a almorzar, el greñudo entró en la habitación con la intención de disfrutar de unos buenos besos, aunque Dulce tenía otros planes bien diferentes...

- En un par de días me dan de alta, ¿podemos vernos?; hablaba la joven por teléfono.

- ...

- Está bien, quedamos en un par de semanas. Un beso; se despedía la pelirroja de su interlocutor.

- Buenas tardes, ¿con quién hablabas?; saluda Uckermann acercándose a su cama mientras intentaba robarle un tierno piquito.

- No Chris, así no...; lo apartaba Dulce María.

- ¿Qué ocurre?; preguntaba él extrañado.

- Olvida todo lo que te dije hace unos días...; pedía la muchacha.

- ¿Qué? ¿Lo estás diciendo en serio?; la cuestionaba el joven ojiplático.

- Sí Chris, no hago más que salir de una relación para meterme en otra. Y siempre acabo mal...; suspiraba la chica.

- Quedamos en que esto no sería una relación como las que has tenido hasta el momento...; la rebatía Christopher.

- Según tú, sientes más de lo que siento yo. Y yo... Ya no sé ni lo que siento ni lo que me pasó por la cabeza en ese momento; rehusaba la pelirroja su proposición.

- De puta madre Dulce, de puta madre. Llevas meses llorando porque juegan contigo, ahora tú juegas con los demás. Al final no eres tan diferente de lo que criticas...; atacaba Uckermann furioso.

- Chris, no es así... No quiero salir lastimada de nuevo; imploraba Dulce cuando las lágrimas ya venían a su rostro.

- Claro, prefieres lastimar a los demás. Está bien, está todo más que claro. Ya he entendido que no quieres nada conmigo y así será. Has llamado a Memo, ¿verdad?; la cuestionaba el muchacho realmente enojado.

- Sí...; se sinceraba ella cuando el chico ya se despedía con un duro portazo.

Before the moon...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora