Before the moon...

Capítulo 163

Tras una plática tranquila con su amiga Maite, Dulce salió de aquel cuarto rumbo al suyo. Pasaban de las ocho de la tarde cuando siente que alguien toca la puerta de su habitación.

- ¡Por fin te encuentro!; la saludaba Christopher con un tierno piquito.

- Sí, estuve toda la tarde con May; informaba ella.

- ¿Todo bien?; preguntaba el joven.

- Sí...; sonreía la muchacha no muy convencida.

- Quería pasar la tarde contigo; decía el chico haciendo pucheritos.

- Puedes pasar la noche; proponía la pelirroja.

- De eso te venía hablar. No puedo... Hemos quedado los chavos para cenar y tomarnos unas chelas por aquí. ¿Ustedes harán algo?; comentaba Uckermann serenamente.

- No, no creo... Me quedaré leyendo o pintando; sonreía Dulce escondiendo su tristeza.

- Está bien. Hasta mañana; se despedían con un tímido beso.

Cuando el hombre cierra la puerta, una y mil dudas rondan por su mente... En su cabeza ya se creaban mil y una teorías sobre la mujer que esta noche ocuparía su cama. Un nuevo toque de nudillos hace sonar la puerta de aquel cuarto. Ella, esperanzaba que tras ella se encuentre su compañero de banda, corre a abrir expectante.

- Vengo a quitarte la tontería; anuncia Maite entrando a su habitación mientras Dulce la observa escondida tras una mirada triste.

- No, no me mires así. Guido también va con ellos y a mí no me ves así de paranoica; decía su amiga intentando tranquilizarla.

- Pero Guido no es Christopher...; rebatía la pelirroja.

- Pero Christopher te quiere tanto como Guido me quiere a mí, y eso debería ser suficiente para confiar en él; comentaba la joven acertadamente.

- Si tú lo dices...; respondía la muchacha no muy convencida.

- Claro que lo digo, y ahora quítate ese pijama y vayámonos a cenar. Avisamos a Annie y las tres nos bajamos al buffet del hotel. Tenemos mucho que hablar, ya echo de menos nuestras tertulias hasta las tantas; proponía Maite intentando retomar relaciones.