Capítulo 185

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Sería ahora Christopher el que se adueñaría de la situación, tumbándola sobra la hamaca, quedando sobre ella, acercando su pene a la húmeda vagina de Dulce María. Sin ningún impedimento la joven lo dejó entrar, sintiéndolo dentro de sí, meciéndose al vaivén de aquella hamaca de lino. Lentamente... Sin prisa, sin pausa.

Tras unos minutos disfrutando de un sexo relajado, Uckermann, sin avisar, decidió envestirla, despertando en ella un breve quejido que se transformó en exhalo a los pocos segundos. Acoplaron sus cuerpos a la perfección. Sus movimientos eran cada vez más rápidos. Y Dulce se arqueaba una y otra vez en busca de su miembro.

- Ya, ya, ya...; suplicaba la pelirroja.

El joven escuchó sus plegarias, y la magnitud de sus embestidas aumentó de manera considerable. Dulce se retorcía bajo aquel cuerpo que la estaba haciendo enloquecer, más aún cuando acompañaba sus duras acometidas con sensuales besos en su boca, su cuello, sus pechos... Mientras, ella, clavaba sus uñas mordidas en la espalda de su compañero.

El ritmo no hacía más que aumentar, sus gemidos lo hacían también... Sonrisas extasiadas, ojos en blanco...

Ambos estaban a punto de llegar a un orgasmo placentero. Dulce agarró los brazos de su novio haciendo que este cayese nuevamente sobre la hamaca mientras la muchacha tomaba, una vez más, las riendas de la situación. Ella cabalgaba como amazona experimentada, él sujetaba sus nalgas con gran ímpetu. Sus bruscos movimientos hicieron que él llegase al clímax, ella lo hico apenas unos segundos después...

Y así, sumergidos en un maremágnum de sensaciones, la pelirroja se dejó caer sobre el greñudo. Sus cuerpos se mecían, acompasados, sobre aquella hamaca que se movía al vaivén de su agitada respiración.

Poco a poco sus fuerzas se fueron aflojando y el cansancio se adueñó de ellos. Se quedaron dormidos en aquella posición, desnudos, abrazados, solos en esa vegetación salvaje que los rodeaba. En silencio los observaba una vieja amiga... Al fin y al cabo la luna siempre sería su confidente.

Before the moon...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora