Capítulo 149 "Nos graduamos (parte 2)"

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Después del brindis por nuestro futuro éxito en cada una de nuestras carreras y de la cena misma, todo regresamos a la pista a seguir bailando, Sergio fue el primero en poner el desorden al comenzar a cambiar de parejas de baile a manera de juego con la intención de bailar con cada una de nuestras amigas además de su novia Mony.

Al igual que Sergio, bailamos todos con todas nuestras amigas y fue ese mismo juego el que me llevó al mayor descubrimiento del momento, al tener que bailar con Zara, quien me miró enternecida, fijamente a los ojos mientras yo tomaba su mano y su cintura a la par, para bailar.

Mientras bailábamos, ella me contó que hacia un par de meses que ella se había graduado en Suecia como abogada y por ello es que ya no le sería posible regresar a vivir con nosotros, por estar trabajando en un despacho allá y por tener todo el esquema legal de Suecia en las venas.

Me contó además, que llevaba casi 4 años de conocer a Adam, quien después de estar teniendo un gran desenvolvimiento en la empresa de su jefe, ahora ya tenía un trabajo y sueldo fijos; y entonces me dijo muy contenta que ahora ellos dos vivían juntos, fue en ese mismo instante cuando me mostró aquel anillo en su mano que antes yo no había notado y con lágrimas en los ojos y una pulcra sonrisa asintió al entender yo, cual era su motivo...

Su felicidad al contarme lo que yo supe en ese momento, me hizo sonreír de igual forma al contarle lo próspera que era mi relación con Lea desde que comenzamos a salir. Cuando menos me di cuenta los dos habíamos parado de bailar y nos encontrábamos mirándonos uno al otro felicitándonos por nuestros logros sin necesidad de emitir palabras.

Aquella fue la primera vez en que pude hablar con ella de todo lo que nos sucedía sin discutir o montar alguna clase de escena, al menos no hasta que ella quiso disculparse por todo el daño que me había causado anteriormente con sus desplantes y alegorías, mientras en la pantalla eran proyectados algunos de los mayores logros de cada uno de los miembros del grupo de diseñadores gráficos que estábamos presentes.

Entonces todo se complicó cuando el dibujo aquel de mi tercer lugar en donde Zara fue mi modelo sin saberlo apareció frente a todos nosotros en aquellos 8*8 metros, entonces me tensé ligeramente, bajé la mirada cabizbajo buscando ordenar mis ideas antes de darle mi disculpa por no haberle dicho nada, cuando sentí sus manos tomar mi rostro y elevarlo poco a poco hasta que nuestros ojos se miraron entre si, sonreí con dificultad cuando ella me cuestionó.

-Ese dibujo no lo había visto... Cuando lo hiciste?
-Hace un par de años, hubo un concurso al cual Lea me obligó a entrar porque ella quería entrar pero no sola, así que... Me inscribió y justo ese fue el dibujo que me ayudó a ganar el tercer puesto...
-Vaya...eso no me lo contaste... Y Lea no se molestó porque me dibujaras?
-No tenía porque molestarse, en ese entonces no éramos novios, además sólo fue un dibujo...
-Lo se... Pero veo que lo has perfeccionado...
-Mentiría si dijera que no, tenía estudiado cada centímetro de ti desde el primer día en que te vi... Tu figura, tu cabello, tus ojos, sonrisa e incluso tu caminar los conocía a la perfección en ese tiempo.
-En ese tiempo era tu musa del arte....y ahora...Sigo siendo tu musa?
-Zara... Mentiría si dijera que aun lo eres, porque aunque tengo aun cientos de dibujos tuyos, ese fue el último dibujo que realicé de ti y...porque ahora mi musa esta físicamente a mi lado día con día, tiene ojos claros, cabello rubio y tez blanca, un cuerpo curvilíneo que es acompañado por su sonrisa y una forma de ser maravillosa...
-Lea...
-Ni más, ni menos que la belleza física y psicológica en persona, una mujer con cualidades impresionantes de quien me he enamorado por su forma de ser en un primer momento y su físico una vez que ya estaba hasta el cuello, loco de amor por la sinfonía que ella componía en nuestro diario.
-Así que era verdad que ibas a olvidarme?
-Aún sigues aquí, en mi mente, en mi más bello recuerdo, en el recuerdo de mi primer amor....
-Oli...

Después de ver sus ojos cristalizarse con mis últimas palabras, le agradecí por haber sido quien despertara en mí, todos los sentimientos que ahora Lea había logrado moldear con su perfecta manía de estar a mi lado.

Tomé sus manos con las mías y las acaricié con un suave toque, miré así, sus ojos derramar un par de lágrimas que limpié evitando que su maquillaje se corriera y la abracé con la mayor de mis ternuras puesta en ella.

Ahora nuestras vidas estaban tomando el camino que debíamos tomar desde que nos separamos por vez primera, ella al lado de Adam y yo al lado de Lea, sin olvidar lo que vivimos pero empezando a vivir algo nuevo al lado de quienes habíamos elegido....

El arte de amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora