El arte de amarte

Capítulo 30 "CELOSO"

Habían pasado más de 6 meses desde el primer día en que vi aquella hermosa figura con mis propios ojos, desde que, por vez primera me sentí atraído por sus bamboleantes caderas, su tierna mirada y su hermosa sonrisa. Habíamos atravesado buenos y malos momentos juntos, nos habíamos distanciado después de algunas discusiones pero, al final habíamos logrado permanecer uno al lado del otro día tras día.

Tenía más de 50 dibujos de cada momento que había vivido con ella hasta entonces, cada uno de ellos guardado en el álbum de dibujos que demostraba cómo iba madurando poco a poco nuestra relación desde el día en que por primera vez dijimos "Hola".

Ella había logrado cautivar mis sentidos con una simple y sencilla palabra, había logrado transformar mi ruda y cruel manera de pensar acerca del Amor a primera vista. Había provocado que mi lado más dulce saliera a flote y, mis ojos daban cuenta de ello cuando estaba a su lado.

Aun si salíamos los dos acompañados por Noemí, Vania y Danny, los momentos que pasábamos juntos eran siempre especiales, había días incluso que invitaba a mis amigos a salir con nosotros 5, de tal manera que, ellos pudieran entretener a mis amigas mientras Zara y yo nos perdíamos entre nuestras miradas.

Me fascinaba ver cómo Zara y Noemí se habían relacionado tan bien, sin embargo, a veces me molestaba ver que ellas hablaban en secreto de "cosas de mujeres".

Uno de aquellos días en que las vi secreteándose la una a la otra, no pude soportarlo más y simplemente me fui de la banca del parque en que estábamos los 3.

Ese mismo día, recibí un mensaje de whatsapp de Noemí, cuestionándome por mi actitud y, la respuesta a sus preguntas, llevaban buen curso hasta que mi mala suerte se hizo visible por segunda vez, dejándome por completo al desnudo.

&Oliver, ¿qué te pasa? ¿Por qué te fuiste así?

&Tenía cosas que hacer y ustedes estaban platicando...

& ¡Ja ja ja! ¡ESTÁS CELOSO!

& ¿Celoso? ¡No claro que no!

& ¡Ah, pero claro que sí! ¡Definitivamente ustedes dos son tal para cual! ¡Par de colosos!

& ¡SHHHH! ¡Cállate! ¡Eso no es verdad!

& ¡CELOSO! ¡CELOSO! ¡Oliver esta celoso!

Furioso por no poder controlar las palabras de Noemí, no contesté más a sus mensajes. Porque no quería discutir con ella, quien si se aferraba a un solo comentario, no paraba de insistir hasta obtener respuestas.

Mientras fingía no ver que Noemí seguía escribiendo mensajes haciendo referencia a lo que según ella yo tenía en ese momento, me puse a dibujar para poder pensar un poco en lo que sucedía. ¿Celoso? ¡Pfff! No podría estar celoso de una amistad de ellas dos, no cuando fui yo quien las unió.

Al menos eso pensaba hasta antes de quedarme dormido y entonces, descubrí... que sí, estaba celoso y lo estaba porque la quería sólo para mí y, la quería sólo para mí porque yo, no sólo estaba enamorado como antes.... la quería sólo para mí porque acababa de darme cuenta de que... LA AMABA....