Capítulo 59 "Advertencia"

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Desperté en la cama del hospital, conectado al típico aparato de las películas, que mide el ritmo cardíaco, me encontraba realmente confundido. No tenía la menor idea de lo que me había sucedido mientras esperaba a que Zara llegara a mi en el parque, solo sabía que se me había nublado la vista y de repente me había desmayado.

Me sentía ansioso, desesperado e intrigado, a la expectativa de saber qué era lo que me había pasado, cuando escuché la angelical voz de Zara en la puerta, entró y de inmediato llegó hasta donde me encontraba. Sus ojos me miraban fijamente, yo miré los suyos que estaban llenos de lágrimas, sus manos tomaron mi mano derecha que era la que estaba libre y la sentí temblar.

-O...Oli...
-¿Qué pasa hermosa? ¿porqué lloras?
-Me... nos asustamos mucho...
-Lo siento...no tengo idea de lo que...
-Tus padres están hablando con el doctor y...Noemí y César están hablando con los demás para avisarles lo que pasó.
-Ooh... y tu...sabes algo?
-Ay Oli... Oli...

Zara empezó a llorar un río de lágrimas desde cada uno de sus hermosos ojos, lo que me tensó por un momento pero luego de mantener el control pude elevar mi mano izquierda y limpiar sus lágrimas con especial cuidado, haciendo que sonriera. Unos minutos después de quedarnos en completo silencio, escuchamos que alguien se acercaba a la habitación. inconscientemente miramos los dos a la puerta que se abría en ese momento y dejaba pasar a mis padres y al doctor.

D: señorita... puede salir un momento, por favor? necesitamos hablar con el joven...
-NO! yo quiero que ella esté a mi lado.
M: pero hijo... el doctor...
-Sea lo que sea que me tengan que decir, no tengo que ocultárselo a mi novia, así que ella se queda!!
Z: Oli...tranquilo..respira...
P: bien, si es tu decisión... ella puede quedarse.
-Gracias...
D: Oliver, habías presentado desmayos similares anteriormente?
-No señor
D: Has presentado síntomas de cansancio extremo después de correr, saltar o caminar?
-Pues no...lo normal...
D: Has presentado dificultades al respirar como dolor en el pecho o mareo momentáneo?
-Un par de veces...podría decirme de una vez a que vienen tantas preguntas?
M: Oliver, respira
D: Tenemos que realizarte un par de estudios antes de confirmar nuestro diagnóstico que parece ir encaminado a una Insuficiencia cardíaca de primer grado.
-insufi...que?? problemas del corazón??

Repentinamente sentí que Zara soltaba mi mano y vi que se tapó la cara con ambas manos para ocultar su llanto, lo mismo que mi madre, mi padre bajó la mirada al piso y yo miré al doctor intentando que me diera una respuesta concreta a sus palabras.

D: afortunadamente la insuficiencia cardíaca se puede tratar con una serie de medicamentos que disminuyen el efecto de la presión arterial para que tu corazón no se esfuerce en demasía...

Mi pecho dolía en verdad, me era imposible detener ese sentirme ahogado por las palabras que no terminaban de procesarse en mi mente.

-Pero juego fútbol....esto....esto...
D: aún puedes jugarlo, solamente tendrás que mantener un control en los medicamentos y evitar el agotamiento en exceso....Es solo una advertencia Oliver, tu corazón está pidiendo atención y se la vamos a dar, habrá que hacer un par de exámenes antes de comenzar el tratamiento...
-Bien...

Unos minutos después, mis padres salieron tras el doctor para ir a su consultorio y hablar de los medicamentos y tratamientos posibles, Zara y yo permanecimos en silencio hasta que ella se acercó y me besó en la frente, su cálido roce de labios en mi piel, me estremeció; me transmitió tranquilidad y comprensión con un simple beso.

Llegaron al cuarto el resto de los chicos, incluido Sergio para saber qué me había sucedido y fue, Noemí quien me abrazó primero una vez que les hablé de lo que había dicho el doctor. Yo sabía que no era una enfermedad que me fuera a matar de la noche a la mañana, sabía que tendría que cuidarme y limitar mis actividades diarias y que el medicamento sería permanente, pero tener una salud perfecta un día y luego terminar en el hospital con una advertencia, no era algo que yo hubiera pensado que pasaría jamás.


El arte de amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora