Capítulo 71

9.6K 492 50
                                    

-Me tengo que ir. -dijo Lola.

-¿Qué dijiste para venir?

-Dije que fui a comprar golosinas.

-¿Y las golosinas? -preguntó Cameron elevando la ceja.

-En mi bolso que esta en tu sillón. -contestó Lola sonriendo con alteza. -Las compré cuando me fui de acá.

-Mi reina inteligente. -halago el abogado. -¿Vienes hoy a la noche?

-Tal vez.

-Por favor. -pidió Cameron. -Quiero hacerte gritar mientras te hago el amor.

-No grito.

-Sí gritas. -Cameron besó el cuello de Lola. -Y me encanta.

-No grito. -insistió Lola separando a Cameron.

-Me encanta cuando gritas mi nombre. -sonrió Cameron.

-¿De verdad grito? -preguntó Lola sonrojada. Parecía preocupada.

-No, mi amor. -Cameron se aguanto la risa. -Solo gimes y eso me encanta. Es común que sientas placer con alguien como yo.

-¿Alguien como tú?

-Sí, como yo. Tan sexy y atractivo. -dijo Cameron. -¿Lo vas a negar?

-No puedo.

-Lo sé.

-Me gusta verte sonreír.

Lola se levantó de la cama y Cameron imito su acto. Ambos salieron de la habitación y fueron al living. Lola agarró su bolso negro y lo abrió para sacar un chocolate y darselo a Cameron quien lo aceptó y le dio un beso a su vecina.

-¿Vienes? -volvió a preguntar Cameron.

-Sí. Te mando un mensaje.

Cameron asintió y agarró a Lola por la nuca para acercarla a él y darle un beso. Lola rodeo el cuello de Cameron con sus brazos. Un beso dulce y lento como los que siempre le gustaron a Lola. Cuando se separaron ella dio media vuelta y se alejo de Cameron y salió de la casa. Caminó hasta la suya y fue a la cocina donde vio a sus padres besandose.

-Hola. -dijo Lola incómoda.

-Hija. -Devonne se separó de su marido. -¿Compraste las golosinas?

-Sí. -sonrió. -¿Qué vamos a comer?

-Carne con papas fritas.

-Yo voy a terminar de leer algunos papeles. -dijo Edgar saliendo de la cocina.

Lola asintió y siguió a su papá con la mirada hasta que desapareció. Luego guardo las golosinas en la heladera. La joven se sentó en una silla dejando su bolso en la mesa. Devonne estaba pelando las papas.

-Hija, ¿te puedo hacer una pregunta?

-Supongo que sí.

-¿Te ves con ese chico misterioso?

Lola abrió la boca. Creía que ese tema eran un tema con cerrado para Devonne. Se había confundido. ¿Qué le iba a responder? Si le decía que sí, la iba a llenar de preguntas y si le decía que no, también la iba a llenar de preguntas así que no sabía qué responder para que Devonne se quede tranquila.

-¿Con qué respuesta te vas a quedar tranquila?

-Dime la verdad.

-No. -contestó Lola. -Listo.

-¿Por qué?

-Mamá no quiero que me hagas preguntas. Sabes que no me gusta en absoluto que me preguntes ese tipo de cosas. Me pone incomoda que vengas y preguntes sobre él porque quiero olvidarlo y tú lo traes a mi cabeza de nuevo. -se quejó Lola.

Prohibido [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora