Camila abrió los ojos lentamente, se paró de la cama y tocó su estómago, no se sentía nada bien. Caminó lentamente hasta el baño, se miró en el espejo, se veía fatal.
Pestañeó algunas veces, y tuvo que abrir el retrete para vomitar, se sentía horriblemente mal, se asió y aún después, todo estaba revuelto en su interior.
Llevaba puesto pantalones cortos y blusa larga, su pelo seguía siendo un desastre, así que lo tuvo que amarrar, bajó las escaleras, tenía hambre, demasiada.
Roger se quedó mirándola fijamente, y Dexter por igual, ninguno dijo nada, ella se sentó y se quedó mirando hacia abajo, sabía lo que había hecho el día anterior, no había estado bien, lo sabía.
No recordaba mucho, pero suponía que dada la mirada de los chicos, había sido malo, ni siquiera quería recordarlo. Tocó su cabeza, dolía horrores.
— ¿Quién te dio permiso para salir de tu habitación? —preguntó Dexter.
Ella frunció el ceño, el dolor se había intensificado en cuestiones de segundos, ¿Qué pensaba él? ¿Qué estaría como una prisionera? ¡Por Dios! Estaba siendo ridículo. No tenía tiempo para sus reglas tontas. — ¿Sabes qué? —Preguntó parándose del asiento—. Vete al diablo.
Caminó lentamente hacia su habitación cuando escuchó que él se levantaba bruscamente, ella miró hacia atrás y en solo parpadeo, él la tomó bruscamente del brazo. —Me harté de ti, recoge tus cosas, te vas.
Eso la hizo alzar las cejas. — ¿Me voy? —preguntó sin entender.
— ¡Te vas de aquí! —Gritó él, empujándola bruscamente hacia las escaleras—. Te doy cinco minutos.
—Dexter... —dijo Roger caminando detrás de él.
—No te metas en esto —dijo él, sin mirar hacia atrás.
Camila rodó los ojos. —Bien —dijo subiendo rápidamente hasta su habitación. Estaba tan sorprendida que apenas podía encontrar las cosas en su habitación, él la estaba botando de la casa. No sabía cómo sentirse, se había Acostumbrado demasiado a ellos, sería difícil iniciar de cero.
Tomó la pequeña maleta que guardaba debajo de la cama y empezó a empacar sus cosas esenciales, sintió que las lágrimas se acumulaban en sus ojos mientras guardaba cada cosa en su maleta.
—Ya se acabaron tus cinco minutos —dijo Dexter bruscamente, entrando en la habitación.
Ella no pudo evitar derramar las lágrimas. — ¿A dónde voy a ir? —Preguntó tristemente, pero él ni siquiera la miró, solo se acercó a su maleta, la cerró y la tomó en la mano. —Ven, Camila —dijo en tono frío.
—Pero no he terminado de empacar mis cosas —dijo llorando.
Él ni siquiera dijo nada, sabía que Dexter podía ser autoritario y controlador, pero no cruel. Roger estaba tratando de hacerlo entrar en razón, pero él simplemente ignoró a todos.
Caminó hasta el auto y metió la maleta en el asiento trasero, Ronald estaba sentado en el asiento del conductor, pero ni siquiera la miró, podía notar que estaba tenso. Miró a Dexter una última vez para asegurarse de que lo que estaba viviendo era real. —Entra al auto —dijo él, abriendo la puerta para que entrara.
—Dexter— susurró lentamente, pero él solo la miró fijamente, era obvio que estaba enojado, pero nunca lo había visto hacer algo así.
— ¿A dónde me llevarás? —Le preguntó a Ronald, pero él solo respiró hondo y empezó a conducir.
Era increíble como todos le habían aplicado la ley del hielo, sabía que lo que había hecho había estado mal, además no volvería a consumir drogas nunca más, lo podía jurar.
Ellos eran como su familia, y siendo sincera no quería regresar al lugar en el que vivía, no quería volver a tener que trabajar en un lugar que odiaba para poder sobrevivir, no quería vivir en apartamentos en malas condiciones, ni tener que compartir el piso con personas no confiables.
No quería volver a sentir miedo cada vez que saliera sola del trabajo, no quería volver a sentirse miserable, y desdichada, no quería tener que pasar por todo ese infierno otra vez.
Frunció el ceño al ver el cambio de ruta que habían hecho, se estaban alejando de la ciudad, eso la asustó. — ¿Ronald? —Preguntó asustada.
Él la observó. — Camila —dijo dirigiéndole la palabra por primera vez en todo el viaje—. No te pasará nada malo.
Pero eso no la tranquilizó, y tampoco la ayudó ver que aparcaban frente a una casa de madera pequeña, miró a los lados no había nada más as alrededor, aparte de árboles y un río. — ¿Dónde estamos? —Preguntó confusa.
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KHÉ :O
Encuesta. ¿A dónde crees que la envió Dexter?
Continuará..
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VOLVERÉ.
Fanfiction© 2016, Samara García. Todos los Derechos Reservados. Título Original: volveré. Todos los Derechos están reservados, incluidos los de reproducción total o parcial. [Art. 56, Ley 424-06] República Dominicana.