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Su cabeza estaba a punto de explotar. Dexter había organizado una fiesta en la empresa, Gilleos Company acababa de comprar una compañía de vinos. Y celebraban la adquisición.

Había conseguido un vestido hermoso, color blanco, de tiros finos, era sencillo y se parecía a ella. Desde que lo había visto, lo había comprado. Fue amor a primera vista.

— ¿Estás lista, bebé? —preguntó Dexter, entrando en su habitación.

Ella asintió, mirándose por última vez frente al espejo. Él sonrió y le dio un beso en los labios. —Estás hermosa.

Todavía no se acostumbraba mucho a la idea de que ellos tuvieran una relación. Si es que así se podía llamar, era libre de besarlo en cualquier parte de la casa, pero aun así no dejaba de ser raro.

Cuando llegaron a la empresa se asustó al ver el equipo de seguridad, Dexter le había explicado que hasta que no descubrieran quien era el causante de los asesinatos de Zerok, tendrían que estar en alerta máxima. Eso era aterrador.

Si decía que se había acostumbrado al estilo de vida de Dexter, estaría mintiendo, es decir, sí había asistido a fiestas con él, pero no se sentía cómoda delante de las cámaras, y muchos menos ahora, que Dexter la tenía tomada de la mano y la besaba en cada momento.

Todos la miraban extraño, y no exageraba, cuando él la besó, todos la miraron de otra forma, y eso la hizo sentir algo incomoda.

Suponía lo que todos decían, ella era una niña comparada con él, que era totalmente exitoso, guapo, seguro de sí mismo, y había tenido novias bastante hermosas. Ella parecía más su hermana pequeña que su novia.

Después de hablar con algunos de los amigos de Dexter, finalmente pudo separarse de él, necesitaba aire, se recostó de una pared, mientras veía la celebración desarrollarse frente a sus ojos.

No se maginaba una vida así, ni siquiera podía hablar en público con un micrófono, se ponía muy nerviosa y le sudaban las manos, no podía ni siquiera pensar en ser el centro de atención de más de veinte personas.

Observó a Roger, el cual estaba en el bar, mirando a Dexter conversar con otros hombres, eso no era extraño, de no ser por la forma en que lo miraba, era como... Ni siquiera podía pensarlo, era como si lo odiara o le guardara rencor, la forma en que lo miraba como si fuera un rival y no su amigo.

Rápidamente desvió la mirada y la expresión en su rostro cambió, nunca había visto a Roger mirarlo de esa forma, ni siquiera cuando pelearon. Esto era algo más profundo, no podía describirlo, pero no le gustaba para nada.

Pensó en acercársele, es decir, talvez pudo estar pensando en algo oscuro mientras miraba a Dexter, no podía creer que lo odiaba en secreto o algo así, ¡Por Dios, se trataba de Roger! Él nunca le haría algo malo a Dex. Nunca.

Cuando caminaba hacia él, vio a Dexter subir al podio, todos le prestaron atención, así que ella detuvo sus pasos y lo miró directamente, Roger se dirigió hasta ella con su habitual sonrisa encantadora. Eso la hizo olvidar rápidamente lo que había pensado, era absurdo, Roger era una muy buena persona, estaban seguros con él.

—...Y hoy quiero agradecerles a todos por venir, ya que esta nueva adquisición representa un nuevo reto. Reto que tomaremos juntos, y que estoy seguro que sin...

Unos aplausos interrumpieron su discurso. Camila miró hacia atrás y se horrorizó al ver a Jessica con una copa en la mano. — ¡Excelente! —Exclamó, parecía furiosa.

VOLVERÉ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora