71

18.5K 1.2K 89
                                        




71

Pía hablaba por teléfono muy seria cuando bajo las escaleras, le dedicó un asentimiento de cabeza y ella solo le miró y continuó hablando. El salió de la casa. Y poniendo un pie en la suya... Diana le llamó.

**

- ¿Y si vamos a Disney? - Le preguntó su hermana ni bien responder la llamada-. En las vacaciones de mis clases de verano, claro- aclaró su tornado en aquella llamada, demasiado temprana.

- ¿Vas camino a clases de piano, Tornado? - con un sonidito respondió afirmativamente.

-Sí, ya he llamado a Pía... y a divina que... me grabó un video de ella bailando, duro poco menos de dos minutos, pero fue hermoso...- el sonrió.

Aun seguía en cama y no quería levantarse, le dolía la espalda y sentía su garganta rasposa. Su madre saludo desde lejos, en la aun presente llamada, y un momento más tarde, colgó cuando su hermana le informó que había llegado al instituto de artes.

Quedó dormido un momento más tarde, y su móvil volvió a despertarlo. Carla y P.J le llamarón y lo atacaron con un sin número de cosas que él a penas y proceso la mitad.

En pocos días era la convención, reunión, del club Logos, un derivado del grupo Bilderberg, donde la realeza, políticos y empresarios desde la telecomunicación y demás empresas multimillonarias son miembros. No tenía idea si todos los de su clan estaban, pero sabía que Dion no iba a ir dado que su hija cumplía un año de nacida y Adon estaba en Italia con su esposa. Sash y Oury si asistirían luego del cumpleaños, aunque dudaba que Jean fuera con Destiny ya que la familia Blackstone era muy unida al igual que Los Lo Russo, así que lo más probable era que ni si quiera Zion, el hermano de Adon, asistiera.

Su compradora personal le envió la ropa de la semana, ya tenía reservado la habitación de hotel porque no iba a estar saliendo y entrando, incluso cuando era tan cerca de su casa, poseía un cupo disponible e invito a Ferrys, aunque iniciaba en viernes y estaba seguro que no saldría ni aunque lo amenazara con matarle.

Pensó en Diana mientras se sentaba en la cama, pero no para llevarla con él, quizás para la cena de bienvenida y el baile de gala la última noche.

Mientras almorzaba en su oficina y miraban las noticias trágicas de un accidente de avión que cobro la vida de setenta y dos personas, su rostro estaba contraído. Siempre que escuchaba de la muerte de alguien sentía una fuerte empatía, el perdió a sus padres y sabia que los familiares de las personas abordo estaba en ese momento sin consuelo alguno.

El vuelo tuvo fallas dado al motor del avión, y otros factores, inmediatamente se puso alerta, ya que si era una aerolínea con contrato en Logos era posible que hubiera problemas legales y rumores por parte de compañías contrarias.

Se comunicó con todos los que estaban al tanto de la situación, Carla entraba y salía de su oficina con cientos de llamadas de clientes, etcétera, no daba abasto.

-Desconecta la maldita línea- el gritó una hora más tarde.

El problema no era de ellos, y esa compañía de aerolíneas jamás había pedido sus serbios, era un alivio, ese avión era un tanto viejo, y si como lucia tenia la maquinaria dentro, mucho había durado para tener problemas.

Lamentaba la situación de los familiares, pero se alegraba que ese problema no fuera de su compañía.

-Aquí se respira paz y tranquilidad -escucho a Gilian, una mujer de cabello corto y alta, muy alta.

Cliché y puntoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora