Daichi llegó, abrió la puerta y miró a su amado tendido sobre los cojines, tenía los libros y cuadernos sobre la mesa, agarraba uno con la mano pero no lo leía estaba profundamente dormido. Miró el agua lista en la olla, las verduras cortadas sobre la tabla de cortar, no quería despertar a Suga tendría que hacer la sopa él mismo, pero ... si la sopa quedaba mal, "mejor lo despierto". Dejó la bolsa sobre el mueble de la cocina, tiró las zapatillas y fue directo hacia su novio. Se agachó, lo observó por largo rato, su nariz casi tocaba la de Suga.
- Oye... Suga, despierta, traje los sazonadores – no había reacción, por lo que besó los labios de su amor suavecito – amor...
- Daichi...
- Sí, traje lo que me encargaste.
- Oh, la sopa – dijo somnoliento.
- Sí, la sopa.
- Ya, me levantó ahora, deja desperezarme – se estiró como un gato y le ofreció su mano.
Daichi lo levantó con cuidado, Suga remeció su cabeza para despabilar, fue hasta la cocina y se dispuso a hacer la tan anhelada sopa.
- Suga... estuve con los Takeyama...
- Ah, ahora que me lo recuerdas, Takeyama san nos invitó a cenar un día de estos.
- Oh, ¿de verdad? – "que bueno que me contó, pero ella me había dicho que sólo invitó a Suga, pero Suga dice que yo también estoy invitado, tal vez alguno de ellos se confundió" – ¿Ambos?.
- Sí, los dos, yo le dije que no te gustaba mucho comer fuera, pero él insistió.
- Él es ... ¿Cómo decirlo?, un tanto bromista.
- ¿Si?, no me había dado cuenta.
- Mmm. ¿Tú quieres ir?.
- Sí, echo de menos que me preparen la comida.
"tengo una idea genial, el fin de semana voy a ir a casa de sus padres, para que su mamá me enseñe a cocinar las comidas favoritas de Suga, sí, eso haré".
- Daichi, ¿terminó la lavadora?.
- Voy a ver – salió y revisó, efectivamente el ciclo había terminado – sí, terminó, voy a colgar la ropa – gritó un poco para que Suga lo escuchara.
- Creo que se va a demorar en secar con este frío – le habló fuerte.
El moreno colgó la ropa aún con el abrigo puesto, de verdad hacía frío, terminó su labor, entró, su novio estaba nuevamente sentado intentando hacer los deberes escolares.
- Daichi ¿hiciste la tarea de inglés?.
- No, aún no hago nada.
- Hagámosla juntos.
- Está bien – se sacó el abrigo lo dejó tirado en el suelo y se acercó al de cabellos plata.
Estuvieron en eso hasta que sonó la alarma de que había pasado el tiempo para que estuviera lista la sopa, Suga se levantó, la probó y apagó el fuego.
- Daichi quedó rica, comamos mientras está caliente.
- Deja ordenar – sacó los libros, cuadernos y lápices.
Suga llegó con dos tazones de sopa, los dejó sobre la mesa, volvió a la cocina por los tazones de arroz.
- El arroz está un poco frío.
- No importa, tengo hambre, huele muy rico – tomó la primera cucharada y sabia a cielo – está delicioso amor.
- Gracias.
- Serías una excelente madre – dijo sin pensarlo mucho, influenciado por los comentarios de Kenji.
- ...
Daichi siguió comiendo, no notó el cambio en la expresión de Suga, "no es la primera vez que lo dices, Daichi... no me digas que quieres hijos... por favor que no sea así, yo no puedo dártelos y eso me angustia", la comida ya no le supo tan rica, pero de igual forma siguió comiendo.
Daichi levantó la vista de su plato y observó a un alicaído Suga, "debe estar cansado de cocinar siempre, definitivamente tengo que aprender, será una genial sorpresa, este fin de semana sin falta".
- Suga... ¿pasa algo?, de repente te quedaste callado.
- Es que me quedé pensando en varias cosas.
- ¿Cómo qué?.
"¿Qué le digo?, no puedo decirle lo de los hijos eso me complica" – nada importante.
- Pero tienes cara de preocupado, ¿no será por Hinata?.
- Me preocupa Hinata, hoy no fue al entrenamiento y nunca falta, Tanaka dijo que andaba mal del estómago pero Kageyama también faltó, lo que es más raro aún, ¿no les habrá pasado algo?, ¿se habrán peleado?.
- No creo que hayan faltado por estar peleados, esos dos siempre discuten mucho.
- Ah jajaja tienes razón.
- ¿Suga estás listo para este viernes?, tendremos que actuar en la obra.
- Ah jajaja sí, creo que ya me aprendí mis líneas.
- Yo aún no, ¿me ayudarías?.
- Claro príncipe.
- No te burles de mí jajajaja, sólo soy el príncipe porque nadie más quiso
- Sería tan amable de ayudar a esta pobre damisela en problemas – dijo Suga con voz aguda.
- Oh hermosa dama, no falta más, dígame ¿en qué puedo ayudarla?.
- Tengo un problema aquí – dijo Suga, osadamente posó su mano sobre su entrepierna, "Dios, no puedo creer que acabo de hacer eso".
Daichi lo miró y sonrió – si está dentro de mi alcance, no dude en que podré ayudarla en lo que sea necesario, ¿dígame qué puedo hacer por usted?.
Suga se puso nervioso, pensó que lo que había dicho sería suficiente pero su amado capitán quería jugar y lo puso en un aprieto, ahora no sabía qué decir sin que fuera muy vergonzoso por lo que se sonrojó hasta las orejas.
"¿Qué le digo ahora?... no se me ocurre nada de nada", giró su rostro avergonzado hacia un lado y sonrió ya que no sabía que más hacer.
- Bella dama disculpe mi osadía, si la he ofendido de alguna forma le pido perdón – Daichi se arrodilló al lado de Suga, tomó su mano y besó el dorso de ésta.
- Daichi... estoy avergonzado.
- Mi bella dama a quien usted llama yo no lo conozco, ¿puede este príncipe ser el reemplazo de ese ser?.
- Ah jajaja Daichiiii.
- Otra vez lo nombra mi hermosa señorita, eso hiere en lo más profundo mi orgullo – puso su mano sobre su corazón.
"Creo que no me queda otra que seguirle en juego" – príncipe yo... – "rayos no sé que decir".
- Sus deseos son órdenes para mí, no dude en mencionarlos.
"Maldito y sensual capitán, quieres que diga cosas sucias, lo sé, quieres que lo haga..." – quiero que me bese...
ESTÁS LEYENDO
Volemos 2 (yaoi), [kagehina] [daisuga]
FanficEsta es la continuación de "volemos", no vas a entender mucho si lees sólo esta historia. Aunque sea obvio lo que voy a escribir pero lo diré igual, TIENES QUE LEER PRIMERO VOLEMOS para poder entender esta... Portada hecha por "eli soraru", por fav...