Capitulo 1, Amy Swan.

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Había sido probablemente el verano más corto y aburrido en la vida de Amy Swan. Tampoco es como que cursar su ultimo año en preparatoria le pareciera divertido, y había esperado pasar todas las vacaciones con su mejor amigo Mason Brown, pero simplemente parecía no ser todas las vacaciones sino solo una semana. Se había deprimido al haber recibido la noticia y se la había pasado la mitad de la vacación escuchando a sus padres discutir acerca de pasar lo que restaba de esta en un campamento familiar más aburrido que ver a Mason jugar con su Playstation, supuso que su hermana Alice estaba de acuerdo con ella.

No era la primera vez que iban al campamento, era ya considerado una tradición que su madre Violet había inventado cuando se mudaron desde París. Había tenido muy pocos recuerdos de antes de París, solo recordaba a Mason, a sus padres y Alice, también la única vez que había reprobado una materia y sus padres habían estado tan furiosos con ella que le castigaron a Mason, sí, a Mason, no lo había visto en tres semanas. Lo peor de todo era que ella y su madre había visto "teen Wolf" y de allí había sacado la idea de castigarle a su mejor amigo.

–Amy, ya tenemos que irnos-había dicho su madre.

Ella había estado recostada sobre su cama escuchando "there's nothing holdin' me back" de su adorado Shawn Mendes. miraba el techo que estaba decorado con un póster lleno de frases. Se había sentado y miraba sus botas, los cuales parecían reírse de ella. <malditas botas> había pensado, melancólica. Después de haberse sentido ofendida por sus botas favoritas, no tuvo más opción que ponérselas a regañadientes. Miro los demás posters en su habitación, había algunos de anime y otros de sus series favoritas, también unos que originalmente serian portadas de libros que también estaban en su extenso librero. había fotos y selfies de Mason y ella, de antes de que se mudara a Wisconsin y de su ex, ella no podía desasearse de esas fotos, tal vez porque todavía no superaba su ruptura, algunos dibujos inspirados en su anime favorito, que su mejor amigo Mason había echo. Se levanto y camino a la puerta, salio de la habitación, cerrando la puerta a su espalda. Camino por el corto pasillo, hasta la sala principal.

Su madre caminaba apurada por la sala, un sombrero de playa en mano y la cámara en otra, ordenando al padre de Amy: Oliver, que tomara cosas que faltaban de subir al auto. Su madre la miro, parecía bajo mucha presión, lo cual no la sorprendía. Sus ojos de un color gris, como el cielo cuando iba a llover, la miraban con felicidad y con apuro, su rostro bonito y de grandes mejillas siempre ruborizadas, su cabello echo un desastre caía sobre sus hombros como una cascada de color marrón y un poco de rojo. Era delgada y bajita, pero no más que ella o su hermana menor Alice. Llevaba puestos unos shorts no tan cortos como los que llevaba su hermana, una blusa blanca con una mándala de colores morado, dorado y azul, unas botas para acampar y unos lentes de sol en la cabeza, dispuestos para hacer su trabajo una vez estuvieran afuera.

–¡Vaya! ya era hora–había dicho su padre, al verla. Él sonreía, como si ya estuviera listo para irse. Su bello acento británico seguía ahí incluso aunque llevaba años viviendo en Nueva York. Su padre era el único alto en la familia y el único hombre, además del pato de Alice llamado sherlock– ¿Qué estas esperando? Ayuda a subir las cosas al auto.

Dijo sonriendo, como si pasar lo que restaba de la vacación en un campamento familiar lo hiciera el hombre más feliz del mundo. Había recortado su cabello, de forma moderna, lo cual lo hacia ver bien. antes había llevado el cabello tan largo que le reposaba en los hombros o lo llevaba sujeto en un chongo. Ella tenia la misma nariz de su padre, fina.

–Tal vez lo que esperaba era a que un asteroide cayera en la tierra y terminara con nosotros, como paso con los dinosaurios.

Su hermana río, tomo a sherlock. Le acaricio las plumas, el pato parecía solo querer a su hermana, porque dejaba que lo cargara y que le acariciara sus suaves plumas amarillas. una vez Amy había intentado cargarlo y el pato le mordido el dedo, tuvieron que acudir a Ray, que le vendo el dedo y dejo que se quedara a dormir en su casa. Amy miro con odio al pato.

Cazadores de sombras: Ciudad de misterios.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora