Cazadores de sombras: Ciudad de misterios.

capitulo 4, cuando el sueño se vuelve pesadilla.

¡advertencia!: contiene spoilers de 13 reasons why, se pide que mantenga discreción ;)

       –Absolutamente no–contesto Amy, estaba recostada en su cama en su departamento en Nueva York. Mason, su mejor amigo desde que tenia memoria, estaba recostado a su lado, le lanzó una mirada de odio fingido a Amy.

       –¿Con absolutamente no, te refieres a por supuesto vamos al pandemonium, Mason?

       Amy recordó cuando eran pequeños y se recostaban en su cama tomados de las mano mientras él le hablaba de crepusculo, dragon ball o avatar: la leyenda de Aang. Amy odiaba crepusculo pero Mason siempre le hablaba de Jacob Black y de como estaba celoso de sus perfectos abdominales.

       –Con absolutamente no, me refiero a que ni esperes que valla–contestó Amy–. Ya te dije que todavía no estoy lista para salir.

       Dijo, le tomó la mano a Mason. Él entrelazó sus dedos con los de ella, se acostó de costado para ver a Amy, le sacó la lengua tocándole la nariz Amy con esta, ella puso los ojos en blanco. Amy jamas se había sentidó extraña por tener a Mason recostado sobre su cama, tampoco sus padres, él siempre había sido el que jugando la tiraba a su cama o en los sofás y se le echaba encima, haber cuanto tiempo aguantaba su peso, a eso él solía llamarle "sandwich al estilo Brown".

      –Llevas tres días encerrada en esta habitación.

       –Mis posters de tokyo ghoul y 13 reasons why me hacen compañía.

       Él entrecerró los ojos y le puso un mechón del cabello de Amy sobre la cara. Mason siempre había sido guapo, más bien dicho, el chico bonito. Hubo un tiempo en el que ella había sentido más cosas por él que solo amistad, pero eso solo duró unos pocos días. Incluso una vez habían salido en una cita que la intensión era que fuera romántica, termino siendo una cita de amigos, incluso hasta se habían besado en los labios, algo de lo que terminaron lamentándose.

       –Bienvenida a tu cinta, Emilia Swan.

       Ella rió y se le sentó encima y le dio un golpe en el rostro con una almohada. Cuando levantó la almohada, Mason estaba abriendo sus ojos de un hermoso color celeste, sus pestañas eran negras, gruesas y rizadas, Amy siempre le había dicho que lo envidiaba porque tenia pestañas y ojos hermosos, a lo cual él siempre le guiñaba un ojo y le plantaba un beso en la mejilla.

       –Y tu cinta va empezar así–carraspeó él–. "¿Han conocido a una persona desde la infancia que les ah dado tanto en la vida  y después le prohíbe salir a bailar y te golpea en el rostro con una almohada?... es literal"

       Dijo dramático, ella volvió a golpearlo con la almohada, a lo que él solo dijo "eso me dolió", su voz se amortiguó con la almohada todavía en el rostro. La apartó del rosto de su amigo.

       –Cálmate, Hannah Baker–respondió Amy, alborotándole el cabello de color café claro–. Eres más drama queen que ella.

       –Me despeinaste–dijo–. Eso es peor que una violación, así que, bienvenida a tu segunda cinta. Ya no te llamare A Swan, Ahora eres Justin Foley.

       –Ese es un spoiler–exclamó Amy, entre risas–. Ademas, estoy segura aquí en mi cueva de oso.

       –¿Enserio fue tan... horrible?–preguntó él, que la tomó de la cintura y la tiró a la cama, quitándose a Amy de encima.

       –¿Tu que crees?–preguntó sarcástica, él la miro de reojo haciendo una expresión de odio.

       Recordó lo que había sucedido esa horrible noche. Amy se había tirado al suelo cuando rubiales había desaparecido. Sus padres entraron por la puerta y Amy había salido corriendo de la habitación de sus padres abrazándose a si misma y conteniendo las lagrimas que tanto querían salir y se había tirado en los brazos de su padre. Les había explicado todo y sus padres habían llamado a la policía, que tardaron en llegar, pero mientras sus padres le habían quitado las espinas de la herida del tobillo y le habían limpiado la herida con alcohol y después la habían vendado.