Cazadores de sombras: Ciudad de misterios.

EXTRA!: Adam

Adam Lightwood detestaba tener que defraudar a su padre. Alec ya le había aclarado que no quería que se convirtiera en un segundo Daniel Herondale, pero no podía evitarlo, le hervía la sangre fallar, lo detestaba. Se había lucido esta vez, pero no lo suficiente.

No le gustaba compararse con su primo, la verdad era que nadie se comparaba a él, él mejor cazador de sombras de su edad al momento. Owen no se quedaba atrás, al ser el cazador de sombras más famoso en la actualidad. Si hubiera realeza en la clave, el cónsul sería el rey, el inquisidor la reina y Owen el príncipe apunto de convertirse en rey.

–¿Estas bien?–Adam se dio la vuelta, Sophie se encontraba cerrando la puerta a su espalda.

Al verla solo vio a su tía Izzy. Sophie y ella eran idénticas, desde que ella era una pequeñita, Adam al verla no podía evitar pensar que eran idénticas.

Adam desde que tenía memoria recordaba vivir en Nueva York. Sabía que había nacido en Idris, aunque no sabía quienes eran sus padres biológicos, y estaba seguro de que ni siquiera Alec lo sabía. Recordaba correr por todo el instituto siguiendo a su hermano Raphael y a Max, mientras su padre estaba distraído. En ese entonces Lucas Stormlight era el director del instituto, hasta que su salud mental empeoró y el cónsul le ofreció el puesto a Alec, en ese entonces Adam tenia unos cuatro años.

–Sí–dijo, Sophia cerró la puerta completamente y se acerco a su primo.

–No, no lo estas–dijo ella. Ella le busco los ojos con los suyos, pero Adam apartaba la vista–. ¿Qué tienes?

Él no dijo nada. Sophia suspiró, le tomó el rostro entre las manos y lo obligó a verla a los ojos. Eso era algo que Sophia ya sabía que lo calmaba, que lo vieran a los ojos era su punto ciego, en especial con Sophia. Cuando Adam tenía un secreto y Sophia lo miraba a los ojos el vomitaba la verdad, no podía contenerlo.

–Quiero que este orgulloso de mi–contestó–. Quería ganar por él, ¿es algo malo querer que tu padre este orgulloso?

Ella soltó una risita y negó con la cabeza una sola vez. Sus ojos marrones brillaban, como siempre. Adam adoraba estar con su prima, siempre lo hacía sonreír y sentirse mejor. Si él quisiera un parabatai, sin duda Sophie lo sería. Pero ambos no lo deseaban, Adam pensaba que era cruel y egoísta atarse a una persona y hacerla sufrir demás si te lastimaban, incluso si morías. Como su padre y su tío Jace. Sophia no le había dicho por qué no quería un parabatai y no la iba a obligar a decirlo.

–Tu me entiendes, ¿no... Sophie?

–Adam, no todas la batallas se ganan. Tienes todo el derecho de enfadarte, pero eso no lo va a mejorar.

         Dijo Sophia, la puerta de la sala de entrenamiento se abrió, y una rubia cabeza se asomo por esta.

       Daniel. 
–¿Diganme que no me odian?

–Vete a la mierda–dijo Sophia, que se había volteado a ver a Daniel.

Daniel se encogió de hombros y salió de la habitación. Se acerco a Soph y la abrazo a lo cual ella le pidió a Adam, con la mirada, que la ayudara.

—Sabes que te quiero, primita–dijo Daniel, con su voz más amable.

–Ya sabes cuales son los riesgos si me abrazas cuando estoy enojada.

          Daniel la soltó, Adam sonrió. Sophia miró enfadada a Daniel, que pretendía estar asustado.

           –¡Hey!–exclamó Daniel, alterado– , con mis futuros hijos no te metas.

Soph sonrió de lado y enarcó una ceja, complacida. Adam recordó cuando Sophie y Dani había llegado al instituto después de tantos años de no verlos. Daniel estaba destrozado por la perdida, casi ni sonreía y Sophia se enfadaba de todo, en especial si la alejaban de Daniel, no tardaron ni un día en acostumbrarse, nada era incomodo, era como si se hubieran visto el día anterior. En ese entonces Daniel tenía dieciséis, Soph trece y Adam catorce. Seguía sin creer que había sido hace tres años.

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HOLA BELLEZAS DIVINAS. AQUÍ ROSALESHERONDALE REPORTÁNDOSE CON OTRO EXTRA!, ANTES CAPÍTULO. Estaba muy emocionada por que leyeran esto y el capítulo, después de haberlo publicado dos veces SIN QUERER, juju 😐😐😐 espero que les haya gustado!

Estoy muy triste!!! Pero feliz al mismo tiempo, estoy dispuesta y contentamente triste de decirles  queda termine de releer LADY MIDNIGHT! Después de unos cuatro meses en los que no podía leer POR CULPA DEL INSTITUTO ya lo pude acabar, YAYYAYY! Me dejo traumas, DE NUEVO, necesito LORD OF SHADOWS!!