FLASHBACK: Ray Pendleton

101 21 26
                                    

Ray Pendleton había nacido en una familia que no era normal, sus padres, ambos hombres lobos. Vivían en Rothenburg Ob Der Tauber, Alemania. Vivían alejados de las zonas turísticas, su padre era el líder de la manada, probablemente el líder más respetado en toda Alemania. Sus padres detestaban las ciudades, ellos siempre habían vivido en lugares rurales alejados de todo y todos. La familia de su padre siempre habían tenido dinero, desde varias generaciones atrás. Vivían en una gran casa en el medio de la nada.

Su madre había muerto cuando él tenía seis años. Su padre solo había tenido un rival, Theodore Halsey. Él no era de ese lugar, cuando su hermano Dannte se había quedado con el puesto del líder en su hogar de nacimiento, el retó al padre de Ray, todos en la manada se habían reído, era tan joven y débil que todos rieron. Había sido de noche, su madre lo había sacado de la cama y se habían escondido en el despacho de su padre. La casa se encontraba en completo silencio, su madre salio, ordenando a Ray a que permaneciera escondido debajo del escritorio. Él asintió, memorizando el color de los ojos de su madre, su rostro tan amable y precioso. Era la ultima vez que la había visto, viva. 

Escucho los gruñidos y las zarpas rasgando la madera. Escucho la piel de su madre rasgarse y su ultimo alarido de dolor. Se quedo hasta que escucho la voz de su padre. Salio de su escondite y corrió hasta él. Nunca se borro la imagen de su madre, el hermoso rostro estaba desfigurado, le faltaba una mano y en todo el cuerpo había zarpas.

Ray jamas se recupero de eso.

Tampoco su padre, que busco a Theodore hasta su ultimo aliento. Ray dejo Alemania en el 2008 un año después de que la guerra oscura terminara, tenía veinte años. Todo estaba en orden en el submundo y decidió ir a Francia, España, incluso por un tiempo a Portugal. Un año después llego a Nueva York, le encanto, incluso más cuando se encontró con Violet. Él se había quedado impresionado con la belleza de aquella pequeña castaña. Había sido en times square, ella había estado usando una chamarra con capucha, miraba al suelo, su rostro estaba oculto. Ray miraba distraído las pantallas, cuando ambos chocaron, ella lo miró a los ojos, sonrojada.

Él jamas había visto a una mujer tan preciosa como Violet, estaba desarreglada, pero aun así, era preciosa. Dentro de sus ojos grises, Ray había visto a su madre, mientras reía, o cuando lloraba, lo cual solamente hacía por felicidad. Sintió como todo él se derrumbaba, no pudo hablar, solo mirarla.

–Perdona–se disculpo Violet, ella se alejo de él, la gente empujando al chico.

Él se había quedado en donde estaba, mientras la veía alejarse lentamente. Se obligo a hablar, cundo ella le dio una pequeña mirada, mientras lentamente se alejaba.

–No hay problema–dijo, se sonrojo, ella sonrió y se fue caminando.

Después de haber ido a su primera obra de Broadway, se rehusó a dejar Nueva York. Busco un lugar en el cual vivir, un pequeño departamento en Brooklyn le pareció bastante decente. Dejo Manhattan y se dirijo a Brooklyn con su equipaje. Lego a su nuevo hogar, abrió la puerta y empezó a subir las escaleras, escucho los zapatos de alguien en la escalera, levanto la vista y se topo de nuevo con esos hermosos ojos grises que lo habían enamorado. Ella lo miró con ojos del tamaño de platos.

–¿Me estas siguiendo?–preguntó ella, sonriente.

–Iba a hacer la misma pregunta–contestó, le sonrió de lado.

–¡Val!–escuchó una voz masculina detrás de ella–. ¿Donde estas...? ¡oh! olvídalo.

Apareció un chico por detrás de ella, tenía un asentó... ¿Ingles? Su cabello castaño era largo y de las orejas para arriba este estaba sujeto a un chongo, su nariz era fina, sus ojos de un color café eran amables y su barbilla larga y fina. Era delgado, débil también. Pero no pudo odiarlo o ponerse celoso.

–Hola–lo saludo el otro chico, le sonrió amable, Ray no pudo evitar hacerlo también.

–Hola–lo saludo Ray.

Val, ese era el nombre de ella. Un nombre que la verdad le quedaba a la perfección, ella miró al chico detrás de ella y se sonrojo.

Pasaron varías semanas, los tres se habían unido mucho, salían a comer comida mexicana, iban juntos al cine, Oliver y Ray jugaban cartas, mientras Violet los observaba. Cuando Ray descubrió que Violet estaba embarazada quiso que todo terminara, que no la hubiera conocido.

Una noche, Ray había subido a lo alto tejado del edificio, quería ver la ciudad desde arriba, Violet había estado sola, mirando la ciudad. Ella miró a Ray y se limpio la lagrima que le había salido del ojo.

–Hola, extraño–lo saludo.

–¿Estas bien, extraña?

Ella asintió, se cubrió la pequeña barriga con el suéter. Otra lagrima rodó por su mejilla. Deseo terminar con su dolor, besar sus labios, abrazarla y acariciar su piel desnuda... Esos no  deberían ser los pensamientos de un amigo, y mucho menos a una chica en cinta, esperando al hijo o hija del único amigo que había tenido en toda su vida.

–Están ahí afuera–dijo ella, mirando abajo–. Buscándome.

–¿Quienes?

Le preguntó, ella respiro pesadamente, se levanto la manga de sus suéter, dejando al descubierto un tatuaje de color carbón, una runa, no un tatuaje. Una runa de cazadores de sombras. Miró la marca sorprendido, ella asintió y volvió a cubrirla con el suéter.

–Alister y Dakota Swanwright, mis padres.

Ray sintió que se desmayaba, se alejo del borde un poco, ella suspiro y hundió su rostro en sus manos. Violet Swanwright, era probablemente la cazadora de sombras más buscada en la historia, no solamente la clave la buscaba, sino también subterráneos, el escolamantico... La corte seelie y la noseelie. Y era solamente una chica con la que se había topado en times square

–Entrégame a la clave–dijo–. En algún momento me encontraran.

Él se sintió incluso más débil, la miró impresionado, ella miraba la ciudad, por debajo de ellos. Él no pudo contenerse, camino hasta ella, le tomó el brazo, ella lo miró, impresionada, una lágrima le cayó por la mejilla, Ray quiso besarla, pegar su cuerpo contra el de ella. Deseo hacer lo que un amigo no debería.

–¿Qué estás...?–preguntó ella.

Ray dejó de lado sus pensamientos y la abrazo. Sintió como el corazón de Violet contra su pecho. Estaba paralizada, hasta que le devolvió el abrazo. Sintió la pequeña barriga contra su abdomen.

–Yo los protegeré–le susurró Ray–. Yo protegeré a los tres, te lo prometo, Val.

Ella sollozo y lo abrazo con más fuerza, él cerro los ojos. Deseo poder abrazarla de esa forma todos los días. Darle el amor que tanto quería mostrarle, sin tener el límite de su amistad.
*******
Había pasado un año y Violet había tenido a su primera hija, su nombre era Amy.

       Era tan pequeña que se asustaba al sostenerla, pensaba que la podría aplastar o algo por el estilo. Violet reía cada vez que la cargaba y Oliver no se quedaba atrás.

       Cuando vio a la bebé por primera vez, Ray se había puesto a llorar, a lo cual Oliver solo lo había calmado diciendo, "ya, ya" mientras le daba pequeños y dulces golpes en la cabeza (de nada más imaginarme a Ray, un hombre lobo EXTRA fuerte siendo consolado por un mundano todo delgadito me da risa 😂😂)

       Ray no se fue del hospital hasta que los Swan también. Él se había hecho cargo de conducir hasta casa. Incluso de tomar las fotos, que Oliver le pedía que tomara.

*******
       Ray había cuidado de Amy y Alice desde que habían nacido, era una especie de tío muy unido. Amy y Alice eran su responsabilidad cuando Val y Oliver no estaban, él las debió de haber protegido ese día. Incluso se había convertido para salvar a Amy y buscar a Alice, había visto al chico Herondale esa noche, supuso que ayudaría de Amy, pero él busco a Alice, Oliver y Violet.
*******
Espero que en verdad les guste!!!!!! Me encanta la historia de Ray!!! ❤️❤️ me pone sad pero feliz. Gracias por leer!!!!

Cazadores de sombras: Ciudad de misterios.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora