Harrystyles: Queen and Princess
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-¿Qué hiciste?
-Le muestro al mundo lo hermosas que son mis chicas.
-Si claro- bufe –Para ellas nunca seré suficiente para ti, y mucho menos ahora- lo último lo dije en un susurro.
-¿Ellas?
-Tus fans, Harry.
-Y que importa lo que digan ellas o los demás ¿Es más cuando te ha importado lo que digan las fans?
-Desde siempre ¿Eres consiente de los millones de comentarios que se van a desatar la foto que acabas de publicar?... "Cómo pudiste regresar con ella... No es tu hija... Es una pu..."
-Hey, no- me interrumpió –A mí me importa un carajo lo que digan, estoy contigo porque te amo y si les cuesta tanto aceptarlo lo siento por ellas o el resto del mundo. Solo nosotros sabemos lo que pasa en nuestra vida privada.
"¿Qué le paso a Leah? Se ve gorda y fea "
"Si esta gorda, que le pida la receta a la madre inocente para bajar adelgazar"
A pesar de lo que Harry decía yo solo podía pensar en los comentarios que había leído en torno a la foto que nos tomó aquel paparazzi, porque en el fondo así me sentía realmente, no me sentía lo suficiente para él y por eso últimamente me he dedicado a rechazar cualquier insinuación que me ha hecho.
-¿Leah, Cariño me estas escuchando?- sentí un par de sus dedos en mi barbilla y me obligo a mirarlo ya que mantenía la mirada fija en la bebe entre mis brazos, sus hermosos ojos brillaban pero sin dejar a un lado la preocupación -¿Hay algo más cierto? ¿Qué pasa, amor?
Tenía miedo de decirle lo que en verdad pasaba de decirle mis inseguridades.
Tomo mis mejillas entre sus manos y con sus pulgares limpio algunas lágrimas que ya estaba derramando –Habla y dime que es lo que en verdad tienes...
-Has leído los comentarios que han hecho sobre la foto que tomo aquel paparazzi-
-Sabes que no leo esa mierda.
Solloce –Harry, mírame bien- me miro aún más preocupado
-Lo estoy haciendo- una linda sonrisa de lado apareció en sus labios antes de darme un tierno beso.
-No Harry, no entiendes- negué con la cabeza e hice que me soltara, camine hasta la cuna de Amelie y la recosté no sin antes darle un beso en la frente.
Era consciente de que seguía mis movientes con la mirada, cuando gire a mirarlo de nuevo seguía parado en medio de la habitación así que me pare frente a él a una distancia considerable.
-Veme- sus ojos solo se mantuvieron fijos en los míos -¿Qué ves?
-A mi hermosa mujer y madre de mis hijos- dio un par de pasos pero sin llegar a acercarse del todo.
-Harry los dos sabemos que eso no es verdad, ve esto- señale mí ya no tan plano vientre.
-Cariño ¿Estás hablando enserio?... No me salgas con estas tonterías...
-No son tonterías, Harry.
-Claro que lo son- término con la poca distancia que teníamos, puso sus manos en mis caderas.
-¿Y crees que a mí me importa eso?
-O sea que si estoy gorda- solloce mientras recargaba mi frente en su pecho.
-No vuelvas a decir eso- susurro en mi oído –No estas gorda, eres malditamente hermosa y perfecta- sus brazos rodearon mi cintura –Hace solo dos meses diste a luz por segunda vez no esperes que de la noche a la mañana vas a recuperar tu peso.
-Con Ethan fue más fácil...- volví a sollozar.
-A ver déjame entender, entonces esta es la verdadera razón por la que no me has dejado tocarte desde que Amelie nació- deje que el silencio hablara por mí, me volvió a soltar para después tomar mi rostro entre sus manos unió nuestros labios en un apasionado beso hasta que nos separamos por falta de aire –Yo te deseo cada minuto que estoy a tu lado y te lo demostrare- en un rápido movimiento me tomo de las piernas y me subió a su hombro provocando un pequeño grito de mi parte.
-Silencio o despertaras a Amelie- dijo antes de comenzar a caminar hacia la puerta de la habitación.
-Harry...- escuche la voz de la niñera muy cerca de nosotros –Oh perdón- se escuchaba apenada frente a la escena no la podía ver pero la conocía –Yo.. yo lo siento pero Ethan está preguntando por ti y le dije que bajarías con él a jugar.
-Jess ahorita no puedo- me removí para que Harry me bajara pero no lo hizo –Tengo un asunto que resolver es más ¿Podría pedirte un favor?
-Por supuesto.
-Prepara una maleta para él y para Amelie, toma las llaves de mi auto o el de Leah y llévalos a casa de mi madre dile que si se puede quedar con ellos el fin de semana que yo después le explico.
-Claro Harry.
-Y tomate el fin de semana libre, también dile a Marie que se puede ir.
Sin decir más continuo caminando por el pasillo directo a nuestra habitación donde me bajo en medio de esta.
-¿Qué planeas Styles?
-Hare desaparecer tus inseguridades y comenzaremos una ardua rutina de ejercicio.
