-Abres un poco las piernas- solté un leve gemido cuando sentí la mano entre mis piernas y separandolas.
-¿Seguro que esto es así?- pregunté.
-Yo soy el profesor así que si así es...- susurró -Ahora te inclinas un poco hacía adelanté- solté un leve gemido al sentir la entre pierna de Harry justo en mi trasero -Tomás el palo con ambas manos y visuaisas la bola- su tono tan bajo y ronco justo en mi oído no me ayudaba mucho.
-Saben que no están solos- nos gritó Adam desde el otro lado de la mesa junto a su esposa.
Lo que me hizo levantar la mirada y ver que teníamos varias mirada a sobre nosotros.
-Pues podrían irse cuando quieran- Harry bromeó.
Hoy fue el segundo concierto en el Madison Square Garden.
Ayer hicimos algo mucho más tranquila, una cena en casa con nuestras mamás y los niños pero hoy Harry quiso un festejo más grande y organizamos una fiesta en un exclusivo bar de la ciudad. En el lugar había más de treinta personas entre amigos y gran parte del staff de Harry.
-Necesito un poco de aire- susurre, seguíamos en esa extraña posición y frente a todos así que me levanté para que nos separaramos un poco.
- Te acompaño- coqueteo.
- No, iré yo sola- me estire un poco para poder darle un beso en la mandíbula.
Fui directo al sanitario más próximo, ahí pide tomarme algunos minutos antes de volver a salir, heche un poco de agua fría en mis mejillas me arrgle el cabello.
Me detuve a u os cuantos pasos de donde Harry se encontraba al ver quien lo acompañaba ahora, respire profundo antes de acercarme a ellos, necesitaba relajarme. Cuando llegue a él me aferre a su brazo en un gesto muy posesivo de mi parte y quitar a la rubia que estaba casi encima de él.
-Regresé para continuar con mis clases de Villar- me dirigí a Harry sin prestarle mucha atención e la chica.
-Leah- Harry me miró y arqueo una ceja.
Lo que significaba que estaba siendo grosera con las personas.
-Hola Camilla- mire a la chica frente a nosotros.
-Hola- respondió y me miró de pies a cabeza.
Harry me dio un beso en la cien, cono premio.
-Ahora si podemos continuar- volví a mentirlo.
-Estamos platicando, si no te importa- bufo Camille.
- La verdad es que si...
-Leah- advirtió Harry pero lo ignore.
- Que insegura eres- se burló -Deja a un lado tu paranoia déjalo que tenga amigas...
- Te equivocas querida, yo a Harry le tengo demasiada confianza se que no se involucraria con alguien como tú- ahora yo la mire de pies a cabeza -En la que no confío es en ti, sólo mirate. Se debe ser una completa desesperada como para seguirlo por casi todo el mundo para llamar su atención y siempre llegar con esta clase de regalos ridículos- señale la playera en manos de Harry igual a la que ella llevaba puesta -Y sólo para que piensen que están juntos ya que tienen oufits combinados- me burle -Déjame decirte que es muy patético de tu parte pero entiendo que necesitas un poco de publicidad...
-Leah basta- Harry siseo.
Camille se rio tras lo que le dije.
-¿Y tú te crees su dueña o algo parecido?- mantenía una sonrisa sinica en sus labios.
- Soy su mujer, creo que eso dice mucho.
-Yo no veo ningún anillo en su dedo, así que para mí es libre...
Mi instinto en ese momento fue estampar mi mano en su mejilla, pero Harry fue más rápido me tomo de la cintura y me alejó.
-Nos vamos- dijo serio.
-La odio...- entre gritando a nuestra casa -Y a Jeff por usar eso como publicidad pero más odio a Nick por meterla en nuestras vidas- me paseaba de un lado a otro en nuestra sala de estar y Harry sólo me miraba calmado y con los brazos cruzados parecía que se burlaba de mi -¿No piensas decir nada?
Se encogió de hombros -¿Que quieres que diga?
- No se... quizá que...
-Justo fue así como me sentí cuando Jared te canto en medio de su concierto.
- No me cantó- susurre.
-Claro que lo hizo.
-Pero hable con él y entendió que sólo seremos amigos y esa maldita bruja zorra prácticamente me dijo que seguirá intentando meterse entré nosotros...
Rápidamente se acercó a mi me tono de la cintura haciendo que me impulsará y rodeara si cadera con mis piernas.
-Me tienes agarrado de las bolas siempre lo que me pides por si no lo has notado. Así que no ella ni ninguna otra mujer podrá meterse entré nosotros dos.
Amplíe una gran sonrisa.
-Pues ahora pido que me hagas el amor.