-Yo puedo bajarme solo mamá- se quejó mi hijo mayor cuando trataba de desabrocharle el cinturón de seguridad de su asiento de automóvil.
-De acuerdo jovencito...
Me hace sentir muy orgullosa lo autosuficiente que se ha vuelto desde que entró al colegio, pero no deja que mi corazón sienta un apretón al ver a mi bebé crecer.
-Entonces ayudaré a tu hermana-.
Mi consuelo es el que Amelie aún necesita mucho de mi.
-Quiero que se laven las manos después de quitarse el cubre bocas.
-Si mamá- me respondió Amelie.
-¿Mamá?- llamó mi atención Ethan. -¿Puedo jugar con mi iPad?
-Primero haces los deberes de la escuela.
-Sí mamá- responde Ethan. -Es una tarea muy fácil, debo llevar un dibujo del trabajo de nuestros papás...
-Baja con cuidado- le digo al ver que desabrocho su cinturón.
-Sí mamá- respondió.
Terminó con Amelie y mientras la bajó les digo:
-Recuerden lavarse las manos después de quitarse el cubre bocas...- los dos asienten. -Jovencito- llamó a Ethan que estaba listo para correr al igual que su hermana. -No olvides esto- le doy su mochila.
-Te amo mami- me grita mientras corre.
Mi corazón dio un vuelco, lo miró alejarse antes de ir hacia la cajuela y tomar las compras qué hicimos después de la escuela.
-¡Mamá!- Amelie me grita desde la puerta,. -Ya regreso papá.
Así como apareció volvió a desaparecer.
Harry volvió y yo por supuesto no sabía nada al respecto, en nuestra corta conversación de hace unas semanas no lo mencionó.
Las risas llegan a mi al primer paso que pongo en el interior de la casa pero detengo el paso cuando escucho las voces.
Esto no es real.
Retomo mi camino.
-Cariño...- Harry se levanta en cuanto me ve. -Sorpresa- sonríe.
Pero mi vista se desvió inmediatamente hacia la mujer que está sentada en el sofá de mi casa, mis dos hijos la miran atentos.
-¡Leah!- se levanta también y se acerca a abrazarme. -Lamento mucho aquella vez en Los Ángeles no me presenté como se debe pero espero que entiendas que el trabajo...
Le sonrió y se ve incómoda igual que yo.
-También al fin puedo conocer a estos encantadores niños de los que Harry tanto me ha hablado son hermosos...
-¿Ethan, Amelie?- los dos niños me miran. -¿Ya se lavaron las manos?- mis hijos niegan. -Pues vayan hacerlo...
-Sí mamá- responde Ethan, trata de tomar la mano de su hermana pero ella se aleja aferrándose a la pierna de su papá.
-Me quedó con papá- le dice a su hermano. Claro que al regreso Harry ella no se va a separar de él en al menos un día.
Harry se agacha a la altura de Amelie para hablar con ella.
-Hazle caso a mami, ve con tu hermano a lavarte las manitas...- y con eso basta para que la niña se vaya junto a Ethan.
-Iré a dejar esto.- digo yo, trato de evadir las miradas de las dos personas frente a mi.
Giro hacia el pasillo que me lleva a la cocina y no es difícil saber que Harry viene tras de mí.
-No sabía que llegarías- digo sin querer mirarlo así que me distraigo sacando las cosas que compré.
-Quería sorprenderlos...
-¿Qué hace ella aquí? Entonces...
-Mírame- pide en un murmuró, pero no lo hago.
-¿Podrías responderme?
-Quería hablar, no se siente bien...
-Espera- me decido a enfrentarlo y mirarlo. -Ella sabía que habías llegado a la ciudad y yo no.
-Debía hacer cuarenta y una prueba más de COVID así que no quería adelantarme a decir algo.
-Soy tu esposa Harry ¿no tenía el derecho a saberlo?
-Quería darles una sorpresa por eso no dije nada...
Asentí, volviendo a desviar la mirada.
-Tenías que traerla aquí, a la casa donde vive tu familia... ¡yo!
-Leah ya hablamos de eso es una amiga- murmuró desesperado.
-¿Lo hicimos? Yo recuerdo otra cosa...
<<-Sabes como es la prensa todas esas fotos son un mal entendido, es una amiga y la estoy ayudando pues está pasando por un mal momento... Un divorcio no es fácil.
-Sé que lo es, cuando nosotros nos divorciamos también tuve apoyo de dos muy buenos amigos y ambos sabemos cómo terminó eso.
-¿Qué quieres decir?
-Solo cuento lo que yo pase...
-Esto no es un tema el cual se deba discutir por teléfono- dijo después de una larga pausa. -Hablamos cuando regresé.
-¿Vas a hablar con los niños?
-Ahorita no tengo mucho tiempo les llamó después...>>
-Leah entiende por favor- pidió. -Olivia no se siente bien y solo trato de apoyarla...
-Véte a la mierda-. salí de la cocina dejándolo ahí pero no tardó en venir tras de mí.
Aquella mujer seguía sentada en la sala de estar con la mirada fija en el patio trasero donde mis hijos estaban.
-Tengo trabajo- digo mirando a Harry sobre mi hombro pasando de largo por la sala de estar.
Olivia entonces se percató de nuestra presencia.
-Oh Será mejor que yo me vaya- dijo ella levantándose del sofá. -Tú acabas de llegar- se enfocó en Harry. -Seguramente quieres pasar tiempo con tu familia...
-Quédate no puedes irte así- le dice Harry aproximándose a ella. -No estás bien...
Esa manera en la que él la miró hizo que el vacío en mi estómago creciera, recuerdo esa mirada y esa conexión que se tienen también la conozco.
Se nos viene lo más interesante
¿Están listas?
No olviden su voto y comentario.
Entre más, más rápido llega la actualización.
