Tenía mis dudosa sobre este paseo familiar que Harry queria que diéramos, hay fans a donde quiera que vayamos y no dudarán en acercarse a él.
-Pero...
-Nada de peros, llevamos un guardaespaldas- no se en que momento Harry se acercó a mi y me abrazó. -No puedes tener a los niños en una caja de cristal para siempre- sabe que mi mayor preocupación son nuestros hijos y el no querer que lleguen a sentirse incómodos.
-Son mis bebés.
-Y los míos, a mi también me aterra exponerlos tanto pero también quiero darles una infancia normal, o bueno en lo que se pueda. Pero crecerán y tendrán que aprender a sobrellevar esto.
-Tú ganas, pero nada de fotos o autógrafos o todas esas cosas, es más ni que se acerquen- dije de broma pero mi marido lo tomo mi y enserio.
-Escucharte bien- le dijo al guardaespaldas que estaba parado detrás de mí.
-Así será, señora- respondió.
- Pero por favor ponte algo más cómodo, vamos a ir a Disneyland y ese traje se ve bastante incómodo- gire a decirle, el sujeto sólo se rió y asintió. No se de donde sacaría ropa so acababa de llegar hace no más de diez minutos.
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Sin duda alguna estaba siendo un gran día, los niños estaban más que felices. Amelie corría por todo el par que persiguiendo a los personajes que nos encontrábamos mientras que Harry iba tras de ella, y yo estaba con Ethan que disfrutaba de subir a todos los juegos que le eran posibles.
- Te dije que estarían felices.
-Lo están- respondí sin quitar la mirada de los niños frente a nosotros.
Habíamos parado a comer antes de ir hacia un espectáculo de Mickey.
-Mamá, mamá, mamá- como pudo Ethan se bajó se su silla y vino hacia mí, gritando. -Pipi, Pipi, Pipi...
-Papá te va a llevar, cariño- dije mirando a Harry.
-¿Por qué yo tengo que hacer el trabajo sucio?
-Porque te recuerdo que yo le cambió el pañal a Amelie.
Sin alguna otra protesta, Harry se levantó y se fue junto a Ethan al baño.
El guardaespaldas quiso iy con ellos pero Harry le pidió que mejor se quedará con nosotras. Hasta el momento llevaba haciendo un trabajo excelente, amablemente les a pedido privacidad a cualquiera que se quiere acercar y afortunadamente lo han sabido respetar y entender.
-Mamá- Amelie llamó mi atención. -¡Ha!- dijo mientras señalaba a un grupo de niños que jugaban ser a de donde estábamos.
-¿Quieres ir ahí?
-Si- festejó, alzando sus bracitos para que la ayudará a bajar. No tardo en caminar hacia donde los demás niños jugaban.
Tanto el guardaespaldas como yo no le quitabamos la mirada de encima.
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-¿Por qué mi niña esta con todos esos niñitos?- Harry gruño a mi lado, no se en que momento había regresado.
-Porque es normal que los niños hagan amigos, además mirala parece divertirse con él- dije tranquila y Harry volvió a gruñir. -Celoso- murmure en su oído.
Pero no sólo Harry estaba celoso, Ethan camino camino hasta donde estaba su hermana la tomo de la mano y la trajo hacia donde estábamos a pesar de las protestas de la pequeña.
