Los días, las semanas y los meses pasaron en un suspiro; un año había pasado de que Dakotsu descubrió su verdadera naturaleza, hoy ella cumplía un año más de vida.
Faltaba poco para que la niña llegara a la madurez y sea capaz de buscar un compañero con quien formar su propia familia. Sakura sabía que cada año que pasaba, el tiempo corría en su contra. El reloj de arena se vaciaba y dentro de poco quedaría completamente vacío, hasta dejar nada más que aire en su interior. Hasta dejar a Dakotsu en la completa oscuridad.
- ¿Madre?.
Su voz la sacó de sus pensamientos. No se había percatado de que permanecía inerte mientras su hija comentaba algo que ella no había oído.
- Estas muy callada, ¿ocurre algo?.- No cariño, no me pasa nada. Simplemente estoy un tanto sentimental, mi pequeña esta creciendo y se vuelve cada vez más hermosa.
Acarició la mejilla de su hija sonriendole con dulzura; era todo su mundo, su única hija.El largo vestido naranja y dorado del atardecer comenzó a adornar el cielo, y Dakotsu no pudo evitar salir e ir hacia aquel bello río donde anteriormente la serpiente le había mostrado lo que era. Llevando consigo una especie de daga, para asegurar su vida por si algún que otro animal decide atacarla.
Soltó un largo suspiro y tomó los extremos de su kimono colocándose de rodillas, observando su reflejo.
Admiraba a una chica con las mejillas ligeramente rosas, ojos grandes oscuros y una larga cabellera ahora recogida. Levantó las manos y dejó caer las ondas negras a sus costados, sobre su pecho.Cerró los ojos y una lágrima cayó por sus mejillas recordando aquel momento donde por un segundo creyó que moriría, donde por primera vez abrió los ojos y se dió cuenta que su vida estaba escrita por la pluma negra del destino. Volvió a levantar los párpados y sintió algo de pánico al observar su reflejo, que no era exactamente el suyo; era el de Naraku, el cual la miraba con una sonrisa de lado.
- Tu y yo no somos iguales.
Le dijo al reflejo, su rostro irradiaba un sentimiento con la cual no estaba familiarizada. Ira.
Levantó la daga a la altura de sus ojos, él filo de ella resplandeciendo ante los últimos rayos del sol.
- Creo que ésta es la única forma de que no me confundan con el horrible monstruo que eres.Dejó escapar todo el aire que estaba reteniendo, apretando los dientes a la par que el filo de la daga rodeaba su cuello.
Y comenzó a cortar...
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La 8va
Fanfiction7 Guerreros. 1 Secreto. 1 Vida Falsa. 1 Chica. 1 Destino. Al abrir los ojos, te das cuenta de que tu vida no se basaba en lo que creías. A lo largo de tu vida, te han hecho creer algo que no es. El destino te lleva lejos, a encontrar para qué fuiste...