- Vete anda, que sé que lo estás deseando.- afirmó Alba al ver como luchaba por abrir los ojos.
- No... qué va.- dije con voz cansada.
- Carlos, ¡qué te estás durmiendo!
Me levanté del sillón y le di un beso en la frente como despedida. Alba tenía razón, apenas había dormido la noche anterior y me estaba cayendo de sueño.
Y es que, ayer en la madrugada, había recibido una llamada que me había impedido pegar ojo.Durante el camino a casa comencé a recordar como había sido.
La tenía completamente clara en mi mente, palabra por palabra.- ¿Carlos?
- ¿Si? ¿Hola? ¿Quién es?
- Hola Carlos, soy la madre de Julia.- dijeron por la otra línea.
- Ah...- comenté sorprendido.- ¡Hola! ¿Qué pasa?
- Mira... yo ya sé que no tendría que hacer nada. Pero mi niña ya está mucho mejor y...- de repente dejó de hablar para luego continuar.- sería genial que fueras a visitarla.
- ¿Mejor? ¿Mejor de qué?
- Carlos, tengo que colgar... Tú ve a verla, anda.
- Pero, ¿le ha pasado algo?
Su madre no respondió, la llamada se había cortado.
Durante toda la noche no pude parar de pensar en sus palabras y, aunque pronto habría un concierto, no tenía la paciencia como para esperar sin hablar con ella antes.
A pesar de como habíamos acabado, yo aún quería a Julia, aún estaba enamorado.
No era algo que pudiera ni quisiera evitar.
Y no podía quedarme tranquilo sabiendo que Julia había estado mal y yo no había estado a su lado.
Ni siquiera sabía que le había pasado..." Ya sé que todo acabó mal... Pero quiero hablar contigo. " - le escribí por WhatsApp.
Abrí su foto de perfil y me quedé mirándola, ampliándola todo lo posible para contemplar cada poro de su piel.
Sin duda, seguía completamente enamorado de ella. Me volvía loco.
Pero estaba tan seguro de que ella no sentía lo mismo por mi... Sobre todo después de como me había echado de su vida.
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La casualidad, Julright
Fiksi PenggemarNo había alternativa, teníamos que enamorarnos.