Tom Hiddleston

4.8K 328 48
                                    

Desperté en medio de la noche, debido al frío que se colaba por la ventana, voltee al otro lado de la cama en busca de mi novio, y lo encontré durmiendo boca a bajo, sin pensarlo dos veces me comencé a mover hacia su lado cuando sentí un gruñido venir de mis pies.

Rode mis ojos al ver que Jerry el gato de Tom, dormía a nuestros pies, e impedía que me moviera hacia mi novio, lo empuje suavemente no queriendo despertar al hombre a mi lado recibiendo un arañazo en mi pierna descubierta.

— Auch!!— no pude evitar quejarme y esto hizo que Tom se despertara preocupado.

— ¿Que pasa? ¿Estás bien?— poso sus ojos azules en mi y al verme sentada y sobando mi pierna prendió la Luz, donde note que la sangre del rasguño había manchado las sábanas.— Que te paso?

— Tu gato, eso pasó.— Gruñi molesta, sobando mi piel herida, el animal comenzó a restregarse contra Tom y el lo tomo para sacarlo de la habitación, cerró la puerta y fue al baño por papel.

— Lo lamento, amor.— se sentó a mis pies y  comenzó a limpiar los rasguños con cuidado.— No entiendo por qué es así contigo.

— Está celoso supongo.— Hablé viendo las tres hileras que dejó marcadas en mi pantorrilla.— Tom, te amo pero no puedo dejar que Jerry duerma con nosotros.

— Si está solo, maullara toda la noche— tiro el papel en el bote y se sentó de nuevo frente a mí.

— Lose, pero lo tienes tan mimado que cada que me acerco termino herida.

— Quizá si fueras un poco más amorosa con el...

Rode mis ojos, y quite mi pierna de sus manos, para venderme yo sola.

— Sabes bien que no me gustan los gatos.

— Y tú sabes bien que yo los amo. Mary, trata de quererlo por mi.

— Tom, deje a mi perro en casa esta noche por qué no quería que se comiera a tu gato. Si eso no es querer para ti, no sé que es.

El hizo una mueca y al ver su indecisión, suspire y me levanté de la cama, tomando mi almohada y sábana.

— ¿A donde vas?

— Al sofá.

— No te vayas a los extremos.

— Simplemente evitó que tu gato maulle en la noche y me rasguñe de nuevo.— bese su frente y salí de la habitación, el minino entro a la habitación con elegancia y burla hacia a mí con la cola en alto. Cerré la puerta y me tiré al sofa, que sorprendentemente era más cómodo que la cama.

Pronto me quedé dormida.

Entr sueños, escuché pasos y luego sentí un peso en mi espalda, el perfume de mi novio inundó mi nariz y solté un suspiro placentero al sentir como rodeaba mi cuerpo con sus brazos. Me voltee y me acurruque en su pecho, el me abrazó con fuerza.

— Que haces aquí?— pregunté con voz ronca sin abrir mis ojos.

— Hacia frío, y no podía dormir sin ti a mí lado.— respondió, su voz retumbó en su pecho desnudo.— Odio discutir.

Sonreí levemente.

— Esa no fue una discusión, fue un desacuerdo. Nada más.

— Puede que dejes de amarme por ese desacuerdo.

— No te vayas a los extremos.

— ¿Igual que tu?— Golpee su pecho y el río entre dientes, soltó un suspiro y me estrecho entre sus brazos.

— No te dejaré de amar, Tom. Prefiero hacer de tu gato una almohada que dejarte de amar por el.

Le sentí reír y le imite.

— Te amo mucho, preciosa.— Sentí sus labios en mi frente.

— También te amo mucho, William.

☘☘☘☘

Al despertar note que yacía envuelta en las sábanas en el sillon y Tom ya no estaba a mi lado.

No me quise levantar por pereza y me acomode mejor, hasta que escuché la voz de mi novio en el pasillo.

— Tienes que entender Jerry que amo mucho a Mary. Y si quieres seguir recibiendo galletas tienes que comportarte.

El gato, como si le entendiera, maullo en respuesta y reí levemente.

— Eres adorable.— hablé llamando su atención, el volteó a verme y vi sus mejillas sonrojadas.

— No más que tu versión de mañana— camino hacia a mí y beso mi cabeza.—Buenos días vida mia.

Le vi caminar hacia la cocina y me levanté para asearme y lavarme mis dientes, después me dirigí hacia Tom que cocinaba el desayuno.

Le abrace por la espalda. El se volteó y enroscó sus brazos en mi cintura, pronto beso sus labios con dulzura, el correspondio el gesto gustoso y cuando iba a pasar mis manos por su cabello sentí el gruñir del gato, me separé de el con un suspiro pero Tom no me alejo.

— Jerry...- hablo con voz severa que me derritió por completo.

El gato, alzó la cola de pronto y sorprendentemente se restregó contra mis piernas y se marchó.

— Vaya, pero que obediente.

— Lose, yo lo entrene.

Reí y me abrace a su cuello.

— ¿Eres el encantador de gatos?

— Me parece que si.— respondió besando mis labios de manera lenta.

— Deberías de enseñarme tus encantos, digo, por si alguna vez los llegue a necesitar.— hablé en un tono sugerente, sus ojos brillaron por el deseo y tanteo a sus espaldas para apagar la estufa.

— oh, vamos gatita.— Contuve un gemido ante su voz gruesa y perfecta, pronto el me tomo en brazos, me guío corriendo hacia la habitación, no sin antes cerrar fuertemente la puerta.

☘☘☘☘

NO COPIAS NI ADAPTACIONES.

MAJO$



one shots.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora