— No puedo creer que sigas esperándolo.— se burló mi mejor amiga al entrar a mi habitación.
— No soy ridícula, el me dijo que volvería.
— Eso fue hace un año, Amelia.
— El lo prometió.
— No todos cumplen sus promesas, Amelia.— hizo una mueca y tomo mi mano.—solo no quiero que salgas lastimada.
— Confío en él.— hablé muy segura.— Lo amo, y el me ama a mi.
Mi amiga sonrió y apretó mis manos.
— Entonces, vamos a esperarlo juntas, el tiempo que sea necesario.
☘☘☘☘☘☘
Caminaba por las calles, apresurada casi corría entre las personas quería llegar a casa lo más pronto posible.
Había visto las noticias, él estaba en la tierra, el estaba cerca de aquí y sabía que el llegaría a mi casa a visitarme como lo prometió.
Subí las escaleras de la entrada y torpemente abrí la puerta con mis llaves, y al entrar me detuve agitada viendo a Mitzy mi mejor amiga verme preocupada.
— Estás bien?
— Él, el esta aquí!
— Thor?— asentir enérgicamente.— Pues vete a arreglar! Apestas!
Sonriendo enormemente corrí directo al baño a ducharme lo más pronto posible, sentía una enorme emoción al poder verle de nuevo después de tanto tiempo, cuando salí Mitzy había elegido mi ropa y me ayudó a peinarme, mis manos temblaron.
— Parezco una adolescente.— murmuré avergonzada, ella río.
— Es normal.
Me senté en el balcón de mi casa, a esperarlo, mi estomago aún sentía un revoltijo y me senté en una de las sillas, deseaba tanto que apareciera en ese momento para besarlo y decirle cuanto lo había extrañado.
Pero el nunca llegó.
Ni ese día, ni los cinco años siguientes.
El nunca fue a visitarme, ni siquiera a decir alguna excusa para quitarme el dolor de la decepción, pero siempre que veía que el se encontraba en la tierra, nunca deje de tener cierta esperanza.
Hasta que ocurrió lo del chasquido, aquello me había quitado a mi mejor amiga, y a mi familia dejándome completamente sola.
Fue difícil, pero logré distraerme cuidando de los niños que quedaron solos al desaparecer sus padres.
Tenía bajo mi cargo a veinte pequeños, me encargaba de alimentarlos y protegerlos, fueron como mis hijos esos cinco años.
La puerta de la casa sonó y me levanté del sofá con el niño más pequeño dormido entre mis brazos, abrí la puerta encontrándome con Steve Rogers.
— Hola! Pasa.
El entro a la casa y cerró por mi la puerta, lo guíe hasta el comedor, el saludo a unos niños que le conocían.
El se había encargado de suministrar los alimentos, medicamentos y cuidado de los niños.
Deje al niño en los brazos de una de las chicas que me ayudaban y me senté frente a Steve.
— Que sucede?
— No puedo venir a visitarlos?
— Claro pero es extraño.— sonrió.
— Quieres agua? Café? Olvídalo café no hay, los pequeños saquearon mi despensa. Fue la única noche en la que no dormí.— Reí al recordarlo, me iba a levantar de la silla, y el tomo mi mano.
— Amelia, tienes razón estoy aquí por otro motivo.
— Cuál es? Puedo ayudarlos?— el sonrió de lado y me soltó cuando me senté de nuevo.
— Hemos descubierto algo que probablemente resuelva todo lo que sucedió, pero para hacerlo necesitamos que tú nos ayudes con algo pequeño.
— Lo que sea.— hablé sin dudarlo, estaba desesperada quería a mi familia de vuelta.
— Necesitamos que hables con Thor.
Tragué saliva y me recargue en el respaldo de la silla.
— Que hay con el? Pensé que estaba con ustedes.
— Lo estuvo, años atrás.—suspiro.— El no la ha pasado bien este tiempo, prácticamente ha perdido todo.
— Que?— sentí un peso enorme en mi vientre al oírlo.
Steve me contó lo que sabía de el y mi pecho dolió de tan solo imaginarlo, me quedé en silencio viéndole fijamente.
— Que te hace pensar que el querrá hablar conmigo? No lo he visto por cinco años.
— probablemente no haya hablado contigo, pero nunca dejó de preocuparse por ti.— se acercó un poco más a mí, alce la vista y note su mirada sincera. Cuando el se iba, siempre checaba con Fury que estuvieras bien.
Asentí tristemente, y apreté mis labios. Sin embargo la pregunta del por qué nunca fue a verme seguía ahi latente.
— y que quieres que le diga?
— Lo necesitamos para salvar el universo, trata de hacer que vuelva a nosotros.
Cerré mis ojos, acaso era capaz de olvidar todo el rencor y tratar de no recalcarlo en su cara, al verle de nuevo.?
Solté un suspiro y pose mi mirada en Steve.
— ¿Donde está ahora?
☘☘☘
NO COPIAS NI ADAPTACIONES MAJO ☘