Entre a mi casa soltando un suspiro de cansancio, tiré mi bolso en algún lugar de la casa al igual que mis zapatos y me recargue en la puerta cerrando mis ojos.
Estaba cansada, a niveles mayores. Sabía que salir al salir al banco en mis condiciones era una mala idea, pero debía terminar unos trámites de un préstamo para poder terminar de pagar el cuarto de mi futuro bebé.
Abrí mis ojos al ver a Steve de pie frente a mi con los brazos cruzados, contuve rodar mis ojos y me enderece para caminar a su lado, estaba molesta con él y por más que me dé su mirada de por favor hazme caso y deja de ser tan terca, por cierto te amo. No iba a caer en provocaciones.
- Genevieve.- lo oí suspirar, le ignore vilmente para dirigirme a la cocina a beberme toda el agua que teníamos en la casa.
Comencé a servirme agua de la jarra tratando de no verlo, me había seguido y estaba de brazos cruzados otra vez. Al beber contuve un jadeo al sentir el movimiento en mi vientre, deje el vaso en la mesa y sentí mis ojos llenarse de lágrimas al sentir a mi bebé.
- Estás bien? Que sucede?- pregunto preocupado acercándose a mi, sin decir nada tome su mano y la coloque en mi vientre justo cuando el bebé se removia.- Dios santo.
-¿No es hermoso?- mi voz temblo viéndole entre lágrimas.
- Lo es.- asintió acariciando mi piel y dándome una linda mirada llorosa.
- ¿y aún así te vas a ir?- susurré y el quitó su mano de inmediato con un bufido.
- Tengo que hacerlo.
- No, no tienes que hacerlo.- tome su mano y le obligue a verme a la cara.- Ya te has retirado. Que busquen a otro para hacer esa misión.
- No pueden hacerlo.
- ¿Por que?- alce la voz.- Están Bucky...y Sam para hacerlo! Respetan el retiro de Clint, ¿por qué no respetan el tuyo?
- ¡Por que yo pedí esa misión!- grito haciéndome retroceder asustada, tenía su rostro rojo y una mirada molesta. Gracias al embarazo que me hacía más sensible de lo normal, no pude evitar sentir un nudo en mi garganta.- Se que cuando nazca el bebé, jamás volveré a estar en una misión, está es mi última vez.
- ¿Que tal si no regresas? ¿Me vas a dejar sola? ¿Nos vas a dejar solos?
- Voy a regresar.- Trato de tomar mi mano y me aleje.
- Eso dijo Tony y ahora pepper y Morgan están solas.
Vi el dolor en su mirada, hacia dos años desde que nuestro buen amigo murió en aquella batalla, y la herida seguía abierta y lo estaría por mucho tiempo.
- lo que haré no es peligroso.
- No quiero quedarme sola. Tengo miedo de que el bebé nazca y tú no estés aquí.
- Voy a mandar a alguien para que esté contigo en todo momento.
- Yo te quiero a ti! ¿Es mucho pedir?
- Si! ¡Lo es!- se soltó de mi agarre bruscamente.- ¡Estar contigo me quitó muchas cosas! Cosas que jamás volveré a tener en la vida.
- Tu decidiste estar conmigo!- grite de vuelta sintiendo un horrible dolor en el pecho.- Tu decidiste formar una familia junto a mi!
-¡No tuve otra opción!
Solté un jadeo y le vi estupefacta, el pareció darse cuenta de lo que había dicho por qué trato de retractarse, pero era tarde ya me había herido y como la masoquista que soy, quise saber más. Apesar de sentirme como la mierda.
