Liliana caminaba en silencio tras caspian que la guiaba hasta el campamento, este hablaba sobre lo que había pasado esperando que la chica lo escuchara, y lo hacía, solo que no estaba concentrada.Su mente estaba enfocada y entro en trance al escuchar que los reyes de antaño habían vuelto, si, había visto a Lucy pero su mente solo se enfoco en buscar a caspian y nada más, no se pregunto el por qué ella estaba ahí después de tanto tiempo.
Por que no quería saberlo.
Ahora que caspian le había dicho que trabajaba con los reyes para acabar con miraz, se hizo a la idea de que en verdad iba a verlos a todos después de que la abandonaran.
Vería a Peter después de que la abandonó justo el día de su boda, la herida dolía aún, ardía como si le pusieran sal cada que recordaba aquel día donde su vida se oscureció para siempre.
Lo amaba aún, pero también lo odiaba por haberle hecho tanto daño al grado de arruinar toda su vida.
Durante los diez años que estuvo consiente antes de que Aslan la pusiera a dormir, lucho para evitar el dolor, las noches en vela, y las lágrimas. Fue duro al principio pero pronto logro pasar aquel dolor intenso a uno más leve pero presente a cada momento, se convenció de que no le daría el gusto a Peter de llorar por él.
Así que después de su exilio se enfoco en pelear en luchas y guerras para proteger a su gente, aún sin el título era una reina había sido criada como tal y debía seguir adelante por su pueblo apesar de estar destrozada por dentro.
Sin embargo el dolor seguía latente pero el trabajo le hizo recuperar un poco la vida que Peter se llevó consigo.
Liliana volvió en si cuando escucho un ajetreo frente a ella, alguien se había lanzado contra caspian y sin pensarlo dos veces saco su daga y jalando a caspian del brazo lo colocó tras ella, amenazando al atacante con la daga colocandola en el cuello del agresor.
— No lo toques.— siseo con ira viendo los ojos del hombre que lo cubrían las sombras, este trato de moverse pero Liliana apretó la daga con fuerza picando su piel con la punta, este trago saliva.
— Hey.— caspian hablo tras ella al ver qué no se alejaba.— Oye está bien, fue un mal entendido.
— Mal entendido?— pregunto sarcástica sin despegar la mirada del agresor.— Casi te degolla!
— Entiendo su actuar.— hablo caspian tomando su hombro con lentitud.— Podrías soltarlo?
Ella lo hizo con un bufido y bajo el arma, el hombre se alejo de ella soltando un suspiro sobando la parte donde la punta de la daga lo toco, retrocedió unos pasos justo dónde la luz dio en su rostro y cuando Liliana reconoció sus ojos azules se quedó sin habla, Caspian vio confundido a Liliana.
— Lili ¿estás bien?
Ante el nombre Peter alzo la vista viendo a la chica, su corazón pálpito acelerado y sus ojos de llenaron de lágrimas.
¿A caso era posible? ¿ Era ella en verdad?
La vio con atención en silencio, notando su joven rostro pero con aquellos ojos que tanto había soñado.
— ¿Lili?— su voz fue un murmullo que hizo saltar el Corazón de la chica, que simplemente se quedó callada.— ¿eres tú en verdad, mi amor?
Su voz, había esperado tanto en escuchar su voz que ahora que la tenía enfrente solo para ella, le parecía irreal, noto su rostro joven libre de la barba que alguna vez estaba en el cuando tenía 29.
Este era joven, su cabello pulcramente cortado y su piel más blanca de lo que recordaba, se veía bien apesar de los años.
Peter avanzo unos pasos ignorando la mirada perpleja de Caspian junto a los narnianos que veían la escena expectantes y confusos.