Dul - No, de hecho no es eso
An - Entonces no sé, ¿les molestó que te hayas ido de Chicago?
Dul - Mejor no hablemos de mi familia si, no es un tema muy alegre para mi.
An - Perdón no sabía -dijo apenada-
La rubia la descolocaba parecía sincera, preocupada por ella y por conocerla, dulce, amable, respetuosa y la verdad era que honestamente no había conocido a nadie con tantas cualidades positivas ni tan deslumbrante como ella. Posiblemente porque el mundo en el que se movía no contaba con personas así, pero aun las chicas de sus encuentros ocasionales no eran así, es cierto que nunca se molestaba por conocerlas ni saber demasiado de ellas pero la mirada de la rubia era especial y eso estaba segura de no haberlo visto nunca. Ya se había olvidado por completo de intentar acostarse con ella, era la primera persona en años con la que le interesaba hablar, a la que le interesaba conocer y que podía de alguna forma traspasar levemente la armadura indestructible que llevaba como una carga, como una forma de protegerse del mundo que consideraba hostil.
An - ¿Conociste algo de la cuidad?
Dul - No mucho, el centro y un poco de las playas. De hecho el departamento que alquilo tiene vista a Malibú.
An - Que bueno, estás en una de las mejores partes. ¿Si quieres alguno de estos días puedo mostrarte más de la ciudad? –sonriendo
Dul - Si me encantaría, tengo varios días libres -extrañamente en ella sonriendo un poco también.
An - Eso está mejor, estabas demasiado seria y tienes una sonrisa muy linda como para no usarla
Dul - Gracias pero sin dudas tu sonrisa es más linda y en ti apuesto a que casi siempre está presente
An - ¿Eso significa que siempre sueles estar seria?
Dul - Si, no soy una persona muy divertida que digamos.
An - A mi me pareces interesante y misteriosa.
Dul - ¿Misteriosa?
An - Si, hay algo en tu mirada, a veces se oscurece cuando te pierdes en tus pensamientos…lo noté cuando
volví del baño y estabas así.
Dul - No deberías ser tan observadora.
An - ¿Por qué? –sorprendida-
Dul - Puede traerte problemas
An - Me arriesgaré
Dul - Ese es el tema, a veces conviene no arriesgarse -dijo seria-… ¿Te llevó a casa?
An - Si dale -confundida por sus respuestas-