Anahi
Desperté y me di cuenta que estaba desnuda, con el cuerpo de Dulce prácticamente desnudo a mi lado. Oh.....si y recordé lo de anoche. Hace un par de horas perdí mi virginidad con la morena más hermosa que haya visto y fue mucho mejor de lo que podría haber imaginado. Fue perfecto, ella fue perfecta a pesar de los miedos de ambas. Mirándola una sonrisa se dibujó en mi rostro, pero luego recordé lo demás.Después de conectarnos de esa forma Dulce quebró su pared protectora y empezó a dejarme saber sobre su pasado. Entiendo porque le cuesta tanto hablar de eso. La vida ha sido más que dura con esta hermosa morena y eso que estoy segura de que ni siquiera sé la mitad de lo que ha tenido que pasar para llegar hasta acá ¿Cuánto maltrato habrá sufrido? ¿Cuánta violencia habrá tenido que soportar?...
Dulce se mueve ligeramente aun dormida y ahora puedo ver su espalda descubierta. Bajo la luz de la mañana noto que allí tiene más cicatrices y marcas, algunas más profundas, otras casi imperceptibles. Estiro el brazo para tocarlas pero me detengo a medio camino, no sé si está preparada para eso. Mirándolas tengo ganas de llorar por todo lo que le han hecho. Desearía ser capaz de borrar todas esas cicatrices, quiero hacerla feliz, quiero que a pesar de su pasado pueda salir adelante y ser feliz conmigo. Sé que puede dejar todo lo malo atrás. Es un doctora, quiere especializarse, no sabrá como ser sociable pero llegó hasta acá sin hacer ninguna locura. Claramente no es como su padrastro por más que ese idio*ta se haya esforzado por sacar todo lo bueno de ella. Solo tengo que lograr que ella sea menos dura consigo misma, que vea que es mucho mejor persona de lo que le hicieron creer que era o que podía ser.
*******Dulce se despertó y vio a Anahi sentada en la cama mirándola.
Dul - Buenos días.
An - Buenos días -dijo con una sonrisa cálida pero en seguida buscó las sábanas para taparse-
Dul - ¿Qué haces? ¿Por qué te tapas con la sábana? Anoche ya vi todo -dijo sonriendo-
An - Eso fue a noche, a la luz de las velas…y ahora es de día y…-dijo un poco nerviosa-
Dul – Oh… Any vamos, sabes que eres hermosa -dijo estirando la mano para bajarle la sábana hasta descubrir sus pechos-.......Así está mucho mejor -dejó un beso en cada uno de sus senos y después la besó en la boca-…Antes de que despertara ¿Algo interesante para ver? -preguntó levantando una ceja y destapándose del todo-
An - Si.....tu -dijo pasando la mirada por el cuerpo de la morena-
Dulce estaba acostada mirándola a ella. Su ropa interior negra con toques de rojo, su tatuaje y su cuerpo perfectamente ejercitado la hacían una combinación irresistible. Anoche entre la luz de las velas y lo nerviosa que estaba, Anahi no había llegado a admirar completamente la sensualidad increíble de la morena.
An - Eres tan…sexy -dijo poniéndose arriba de ella-
Dul – Tu eres la sexy -dándolas vuelta para quedar arriba-
An – Aja -río.
La morena la besó y luego comenzó a bajar hacia su cuello.
An - Mmm Dul…
Dul - ¿Si?
An - Debería ir a casa a ver como está Mayte…
Dul - Dame una horita más, hay cosas que me faltaron hacerte anoche…
An - ¿En serio?
Dul - Muy en serio -bajando a morder sus pechos-
La respiración de Anahi se aceleró.
An - Supongo......que puedo quedarme… un rato más…
Dul - Es una buena idea -encerró uno de sus pezones en su boca y el otro entre sus dedos-
An – Eh…Dul…
La morena comenzó a bajar lamiendo su abdomen. Pasó su aro por el ombligo de su novia, provocándole un escalofrío.
Dul - ¿Podemos probar algo? -le preguntó expectante y dejando húmedos besos justo arriba de su centro-
An - Lo que quieras.....confío en ti –jadeando-
Dulce besó la parte interna de sus muslos, acercándose cada vez más a su entrepierna. Sus manos la agarraron de las caderas para mantenerla fija.
An - ¿Duull? -dijo sin saber exactamente lo que iba a hacer-
Dul - No te preocupes, voy a ser cuidadosa
La morena llevó la boca a su clítoris provocando los gemidos de la rubia. Pasó su lengua por sus labios para volver a su clítoris y suavemente frotar su aro allí. Las caderas de Anahi intentaron levantarse pero las mantuvo en su lugar con sus manos.
An – ¡Dios!... ahh…Duu...Dul…
Dul - Tienes un gusto tan rico Any -dijo casi jadeando sobre su centro-
Dejo de hacer contacto con su clítoris y justo antes de que Anahi protestara su lengua ingresó en ella cuidadosamente. Una de las manos de la morena agarró amorosamente la de la rubia entrelazando sus dedos mientras su lengua entraba y salía.
An – Dul…ya…casi…
Embistió una vez más
An – Ahh… ¡Dul!
Su cuerpo se arqueó para luego ser bajado cuidadosamente. La morena recibió todos sus fluidos, disfrutando de su gusto mientras que la rubia continuaba jadeando. Cuando terminó se relamió y subió dejando besos por toda su piel. Pasó su mano por la mejilla de la rubia que intentaba recuperar la respiración normal. Tomó su mano y la llevó a su boca para besarla.
Dul - ¿Estás bien? -preguntó dulcemente-
An –…Eh…más que bien.
Dul - Que bueno porque con lo rica que eres voy a querer hacer eso muy seguido.
An - Yo no me voy a quejar -dijo sonriendo para luego besarla-
Se quedaron acostadas unos minutos más haciéndose suaves e inocentes caricias hasta que Anahi se levantó.
Dul - ¿Qué haces?
An - Me voy a cambiar para ir a casa
Dul - ¿No quieres que nos bañemos juntas primero?
An - Me encantaría pero es mejor que vaya a ver como está May por si necesita algo y me baño allá.
Dul -Bueno…Déjame hacerte un desayuno rápido mientras te preparas.
An - Gracias amor.
Dulce se levantó, se puso su bata, le dio un beso y se fue a la cocina.