"Es muy difícil estar en la situación que estuve y recordar esas enseñanzas........Para los monjes es muy fácil hablar del perdón o lo que sea porque ellos están encerrados ahí adentro desde los 10 años, no pasaron día tras día siendo golpeados hasta desear que por fin todo se termine, tragándote tu propia sangre. Así es muy fácil hablar y llevarlo a la práctica, para mí no es tan fácil"
"Me estás diciendo que disfrutaste matando ¿Sabes como suena eso?"
"Suena como que disfruté matando al hijo de puta que me cag.ó la vida. No significa que sea una psicópata que voy a salir a elegir víctimas para matar, sabes que no soy así"
"Sinceramente ya no sé como eres"
"Tengo mis reglas Anahi, para mí está bien matar cuando alguien realmente se lo merece"
"¿Ahora estás diciendo que estuvo bien matar a toda esa gente?"
"No es lo que estoy diciendo. Eso era trabajo y me arrepiento de haberlo hecho. Esto es distinto, es una revancha personal y tenía todo el derecho de hacerlo. Aun si no encaja con tus reglas o tu moral. Yo tengo las mías propias Anahi, porque no viví en el mismo mundo que tu" Me dijo tranquila mientras prendía un cigarrillo.
"¿Volviste a fumar?"
"Si pero no creo que sea definitivo. Tal vez lo vuelva a dejar"
"No puedo hacer esto Dulce, lo único que veo en mi cabeza son imágenes terribles que te contienen a ti haciendo......" Me quedé incapaz de completar la frase.
"Necesitas tiempo y pensar en esto, pensar si confías en mi. Solo te pido una cosa, piénsalo desde mi lugar, no desde tus valores. Tomate el tiempo que quieras y cuando estés sola trata de meterte en mi cabeza, imagina que te han golpeado, torturado y humillado por años. Imagínalo en serio, borra por unos minutos los recuerdos tuyos e imagínate de chica tirada en el piso de una habitación con tu espalda ardiendo de tantos golpes con un hierro caliente, tragándote la sangre de tanto morderte el labio para no gritar y atada tan solo para satisfacer los deseos de poder de tu agresor, porque realmente no puedes ni moverte. Piensa que años más tarde lo tienes enfrente y la situación es inversa, ahora tu eres mucho más fuerte ¿No querrías vengarte? ¿Qué harías? Piénsalo Anahi y después ven a verme"
Nunca me había descripto explícitamente lo que le había hecho, ahora había dicho las palabras lentamente, con un gran esfuerzo y la mirada perdida. Sabía que era difícil para ella hablar todo esto, cosas que jamás había pronunciado a nadie. Lo menos que podía hacer era no juzgarla tan rápido, realmente tomarme el tiempo para pensar en todo esto.
"Voy a pensarlo Dul"
"Gracias"
"Cuídate y no.......hagas locuras. No fumes demasiado"
"No voy a hacerlo"
Le abrí la puerta, ella me miró y sin acercarse a mí se fue. Suspiré contra la puerta, sentía el aire viciado y pesado. Necesitaba salir un rato, apenas podía respirar ahí adentro. Saqué una cerveza de la heladera, tomé las llaves de mi auto y bajé al estacionamiento.