QUÉDATE A MÍ LADO

CAPÍTULO 64

Nos fuimos a el campo, nuestros padres tenían todo muy bien organizado, el día iba transcurriendo de forma tranquila, llegando a el fraccionamiento donde vive Madí sabríamos cual es la sorpresa que tenían para élla, ajá como si no supiera.

—Ok, alguien me puede decir porque me van a vendar los ojos.
—Madison recuerda que te dijimos que teníamos una sorpresa para tí
—Si Sra. Gloria pero me pone de nervios que me venden los ojos.
—Tranquila, que Mario primero nos mata a todos antes de dejar que te hagamos algo. —dijo Rk y todos empezaron a reír.

Le vende los ojos a Madí y me pidieron que la llevará al estacionamiento estaba emocionado por ver su reacción, la verdad es que todo fue plan con maña, pues los chicos y sus papás habían empezado a poner pretextos para irse del campo pero ahora se daría cuenta del porque.

—Mario si me tiras me las vas a pagar.
—Ay como que andas muy agresiva conmigo, eso me pasa por ser buena onda.
—Aun no te golpeó así que no puedes decir nada.
—Bien llegamos, Mario quítale la venda a Madison. —dijo la mamá de Saak.
—Voy.

—Mario me quito la venda y woow tenía frente a mí un coche nuevo era increíble—. ¿Y esto?
—Es tuyo. —dijo Ruiz.
—La policía encontró tu coche, al parecer le prendieron fuego, y bueno tú no te puedes quedar sin coche —dijo la madre de Nath.
—Todos nos pusimos de acuerdo para regalarte uno —dijo Saak.
—Y en tu departamento tenemos otra sorpresa para tí —dijo Juanpa.
—Ok.

Nos dirigimos al departamento, y al parecer todos estaban emocionados por ver mi reacción, la verdad no entendía que estaba pasando osea mi cumpleaños es hasta mayo y falta mucho todavía como para estar recibiendo sorpresas. En cuanto abrí la puerta del departamento de escuchó el "sorpresa" por parte de todos, osea estos eran los planes super importantes por los cuales se fueron del campo. Habían remodelado mi departamento se veían increíble, era como woow encerio un sueño, empecé a llorar y Mario me abrazó.

—Gracias a todos encerio.
—No tienes nada que agradecer, lo hicimos con mucho cariño. —dijo la madre de Juanpa.
—Ahora entiendo porque todos estaban actuando raro.
—Queríamos que todo saliera bien.
—Tu habitación quedó exactamente como tu la querías —dijo María Laura.
—Anda Madison ve a verla. —insistieron todos.
—OK.

Fui a la habitación y estaba increíble, lo único que no entiendo es como hicieron para que todo quedara perfecto en tan poco tiempo.

—Te gustó la sorpresa amor.
—Si Mario en verdad quedó increíble todo.
—Todos estuvimos organizándonos para que todo quedara perfecto.
—Y lo lograron. —regresamos a la sala—. Muchas gracias a todos por el detalle.
—No es nada Madison. —dijeron todos.
—Bueno creo que nosotros nos retiramos, ya es un poco tarde y ustedes tienen clases mañana —dijo el padre de Saak.
—Si opino lo mismo —dijo el padre de Nath.

—Todos se fueron y solo quedamos Mario y yo—. ¿Porque tú papá dijo que no quería que mañana le salieras con cosas?
—Amor se me había olvidado decirte que mañana después de clases me voy a Los Ángeles.
—¿Cómo?
—Te acuerdas que te dije que nos iba a tocar a mi papá y a mi ver lo de unos negocios en los Ángeles.
—Si.
—Bueno nos tenemos que ir mañana, también irán Juanpa y su papá, y mi papá me dijo eso porque nunca tengo las cosas listas para viajar.
—Ok. ¿Y cuando regresarán?
—En dos semanas más o menos.
—Ok.
—Bueno, me tengo que ir, nos vemos mañana.
—Si.
—¿Paso por ti?
—No, antes de ir a la prepa iré a ver a Clarisa y a hablar con Patrick. A ver si ya se le pasó lo enojado.
—¿Por que está enojado?
—Por que retire la denuncia en contra de Carolina, no has visto que no me habla.
—Encerio no me había dado cuenta, pero se le va a pasar o talvez ya se le pasó, el no puede estar enojado con su hermanita.
—Aja, no me quiere ver ni un instante en la cafetería.
—¿Osea como? Si yo hablé con él ayer para pedir!e permiso.
—Si, según yo regresaría a trabajar ayer, pero era bajo mi propio riesgo.
—No te entiendo.
—Que Patrick me iba a mandar a freír espárragos y me iba a regresar a mi casa. Porque ya ves que todos los días voy a casa de Clarisa y Patrick.
—Si.
—Bueno Clarisa me dijo que Patrick no me quería ver en la cafetería y que no fuera porque élla no quería que nos pelearamos.
—¿Osea que Patrick no te a pasado dinero ni nada?
—No, y tampoco sabe que me robaron el coche, pero para lo que me importa, Marco y Axel me han estado mandando dinero y yo tengo mis ahorros y si voy a tratar de hablar con Patrick es solo porque se que a Clarisa no le gusta que estemos distanciados y la e notado un poco inquieta.
—¿No te importa que Patrick este enojado contigo?
—No, el ya no es un niño y si no me quiere ver ni hablar pues allá el, porque yo para rogarle a alguien nunca.
—Bueno ya, no te exaltes, entonces nos vemos mañana en la prepa.
—Si.
—Buenas noches amor —dije y la besé.
—Buenas noches Bau.
—Cualquier cosa me llamas ok.
—Si. Oye me llamas cuando llegues a tu casa.
—Claro que si mi niña —le di otro beso y salí de allí.

Qué raro, jamás pensé que Madison y Patrick estaban peleados ninguno dijo nada, aunque algo me dice que Madison tiene miedo de que Patrick no la quiera perdonar.

Al día siguiente, desperté temprano, busque la ropa que usaría y después me di una ducha, pasados unos minutos salí y me arregle, baje y me preparé algo rápido para desayunar. Después de terminar mi desayuno subí rápido a mi habitación, me lave los dientes tome mi celular, mi mochila y mi monedero y baje a la sala, apague el televisor y me dirigí a la salida, tome las llaves del coche y ahora sí al estacionamiento, baje rápido y subí al coche para posteriormente manejar hasta casa de Patrick y Clarisa.

—Amor no crees que ya es tiempo de que dejes tu orgullo y hables con Madison.
—¿Para que? Últimamente Madison prefiere más que la traten mal.
—Patrick, tu no estás siendo razonable, tu hermana te dio las razones por las cuales levantó la denuncia.
—Y...
—Madison a tenido al peor de los enemigos, y ese es tu tío, y tú qué hiciste, solo ir y “hablar" con él, cuando lo que debiste hacer desde que empezó a tratarla mal, es ir, pedir los papeles de Madison y apuntarla en otro lugar, Madison no tiene a nadie quien la oriente ok, y élla no quiere perder a la única familia que le queda, a dejado que tu tío hablé mal de élla con algunos padres de familia y a dejado que ciertos alumnos molestos la traten como basura solo para que tú tío no la corra y tú no te enojes con ellá, ¿y dime qué has hecho? Darle la espalda, te pusiste muy mal cuando élla no quería saber de ti y ahora pareciera que te estás vengando, además si Madison se a mostrado fuerte, es porque algo en el fondo la hace ser dura con ellá misma y sabes que eso hace demasiado daño Patrick...
—¿Clarisa que es lo que quieres? Últimamente te encanta molestar con ese tema o más bien con todo y justo cuando estoy desayunando, comiendo o cenando.
—Quiero que hables con ella, y que por un día en tu vida te comportes como un hermano mayor responsable y maduro, Madison necesita saber que sus hermanos la entienden y necesita saber que van a estar para élla cuando tenga problemas. Y ustedes se están comportando como si élla fuera una responsabilidad más y ya, como si ella no les importará. Y no tienen ni idea de lo que a pasado realmente en su vida.
—¿No crees que estás exagerando?
—No, pero sabes qué, has lo que quieras ok, porque si Madison no tiene a sus hermanos con ellá, por lo menos me tiene a mí y tiene a mis papás.
—Clarisa es muy temprano para que empieces con tus cosas además...
—No, no empieces, el bebé está muy bien no le va a pasar nada. Además a ti ni te importa lo que está pasando conmigo o nuestro hijo así que no lo pongas de pretexto —el timbre empezó a sonar, me levanté de la mesa y fui a abrir en lo que Patrick terminaba su desayuno.

—Hola preciosa ¿No deberías estar en la prepa?
—Buenos días Clarisa, hoy entro a las nueve, solo quería saber cómo estás ya ves que no pude venir en toda la semana.
—Pues hemos estado bien, fui al doctor ayer y me dijo que ya no había peligro pero que igual y tenia que tener cuidado. —me encanta ver el cariño con el que Madí acaricia mi panza que encerio ya está muy grande.
—Ok. —Patrick salió de la cocina y me vio de mala gana.
—¿Que haces aquí? ¿No deberías estar en la prepa? ¿Ya te gustó eso de faltar a clases y que hablen de ti?
—¿Te importa realmente eso? Y de mi han hablado hace mucho tiempo y  más tu tío, que me trata como delincuente y ni siquiera e tenido la oportunidad de destruir su coche  o robar su billetera—dije en un tono seco y sarcástico.
—Creo que necesitan hablar, pero por favor no vayan a pelearse. —dije y subi  a la habitación.