Antes de Tiempo /SNARRY/

40) Escritorio

Cuando Harry se despertó, la luz del sol entraba por las ventanas de la habitación, obligándolo a cerrar los ojos. Debía de ser tarde, pensó, regodeándose en el hecho de que era sábado, y palpó la cama a ambos lados de su cuerpo, pero Severus no estaba allí.

***

Snape sonrió desde el despacho al escuchar el sonido del grifo abriéndose y una melodía. Parecía que su bello durmiente había despertado por fin... Y que estaba cantando en la ducha.

***

Después de secarse y vestirse, Harry salió hacia el despacho donde suponía que estaría Severus. Se frenó en seco en el marco de la puerta al verle sentado en el escritorio vestido con una camisa negra ceñida, con la cabeza apoyada en el puño de manera casual y corrigiendo unos pergaminos con tinta roja, tan concentrado que no se había dado cuenta de la presencia del chico.

Harry se quedó pasmado mirando la cortina de cabello negro que caía con elegancia sobre su mano, cómo fruncía los labios cuando algo del ensayo no le gustaba y un imperceptible movimiento que hacía con la ceja, seguramente pensando en algún comentario irónico. Y la camisa, la camisa era la muerte. Nunca lo había visto con camisa negra, pero le iba como anillo al dedo, haciendo juego con su cabello y ojos y contrastando con su piel que parecía tan blanca como la porcelana, delineando su figura esbelta, su pecho...

Un escalofrío de excitación recorrió su espalda.

Se veía malditamente follable.

Su boca se llenó de saliva y pudo notar cómo su entrepierna despertaba, y eso que era primera hora de la mañana y había quedado muy satisfecho la noche anterior.

***

A Severus no le gustaba mucha palabrería. Apreciaba que un ensayo estuviese bien redactado, pero lo que le interesaba era el contenido. Y estos ensayos concretos no estaban tan mal para lo que solían ser. Parecía que la generación que en ese momento cursaba quinto año no estaba tan mal.

Aún así, llevaban tiempo quejándose sobre que Snape explicaba contenidos de otras materias como pociones o transformaciones y no se ceñía a su puesto de profesor de defensa contra las artes oscuras. Pues bien, Severus les había encargado una redacción sobre las conexiones de su materia con los otros campos de la magia.

Había resultado bastante bien, pensó Severus mientras corregía algunos errores. No le importaba que hubiera errores porque las redacciones eran bastante originales, oponiéndose a las acostumbradas copias de la misma información de algún libro de la biblioteca.

Estaba apoyando la pluma en el pergamino para escribir una S de "Supera las Expectativas", cuando notó que se le bajaba la cremallera del pantalón y dio instintivamente la silla un poco hacia atrás revelando a Harry vestido con su uniforme de Gryffindor arrodillado debajo de su escritorio.

El rubor subió a las mejillas de Severus, que se apresuró a trazar la S antes de dejar una mancha de tinta en el pergamino mientras Harry sacaba su miembro y comenzaba a lamer la punta.

-Harry, estoy corrigiendo- dijo Snape, esforzándose por hacer su voz sonar firme. Un "mm-hm" le llegó desde debajo de la mesa mientras sentía que su polla se endurecía contra los labios de Harry, lo que Severus interpretó como un "sí, ¿y qué?".

-Tengo trabajo atrasado- insistió sintiendo su cara arder, mirando el ensayo que tenía delante. Harry apartó la boca de su miembro y lo acarició mientras decía de manera casual:

-Tú sigue.

Severus rodó los ojos mientras se mordía el labio, con la mano que empuñaba la pluma paralizada a medio camino hacia el tintero, concentrado en la dulce tortura que era la boca de su amante debajo de la mesa.