SUPERLUNA (NamSeok/VKook)

9. Manos a la obra

Luego de 20 minutos de camino ya se encontraban cerca de la manada. Jungkook estaba sorprendido. Por lo general cuando caminaba con un omega desde la carretera principal hasta su casa, en su forma de lobo, le tomaba unos 40 minutos en llegar ya que el camino era algo difícil y el omega no podía seguir su ritmo. Pero con Taehyung fue diferente, el chico tenía un excelente físico, Kook nunca tuvo que esperarlo o disminuir su velocidad porque Tae iba a la par con él, de hecho, en todo el camino Tae se la pasó jugando, correteando y olfateando. Al alfa le sorprendía la cantidad de energía que tenía ese niño.

Antes de llegar a su destino volvieron a sus formas humanas, poniéndose la ropa que traían en las maletas que llevaban amarradas estratégicamente a sus lomos. Tae pudo divisar un bonito pueblo, se veía un poco moderno. Al entrar al lugar, un alfa se acercó para saludar a Jungkook. Luego de un momento dirigió su mirada hacía él, fue un poco intimidante

-Tae, te presento, él es Jackson. Uno de los encargados de cuidar la manada

Tae se inclinó con respeto para saludar al nuevo alfa

-¿Quién es él, Kook?- Preguntó Jackson un poco curioso.

-Él es Taehyung, es veterinario y nos ayudará unos días a cuidar de los cachorros.

-Es un lindo omega- Dijo Jackson pasando la lengua por la comisura de sus labios mientras lo miraba.

-Si no quieres perder una oreja es mejor que no te acerques a él. - Jungkook entrelazó, Inconscientemente,  su mano con la de Taehyung para apartarlo de ese lugar.

Jackson miro divertido la situación ¿Desde cuándo el mujeriego de la manada se preocupaba por un omega?

Cuando avanzaron un poco, Kook se dio cuenta del agarre de su mano y se puso un poco tímido, así que lo soltó rápidamente. Pronto llegaron a una enorme casa, entraron y se dirigieron directamente a una oficina. Jungkook tocó la puerta dos veces e ingreso al sitio mientras Tae lo esperaba afuera.

-Nam, hermano. Ya estoy aquí- Kook le hizo una seña al castaño para que entrara. -Mira, él es Taehyung- dijo alegremente

Tae se quedó observando al tipo que estaba frente a él, este estaba sentado en su escritorio revisando unos papeles. Aquel chico era otro alfa, se veía un par de años mayor que Jungkook. Tenía una cabellera castaña peinada perfectamente hacia atrás, además, tenía un par de lentes de lectura que lo hacían ver interesante. Su expresión era seria y su semblante inquebrantable

Namjoon se levantó para saludar al invitado. -Mucho gusto, mi nombre es Kim Namjoon, soy el hermano mayor de Jungkook. Él me ha hablado mucho de ti, agradezco mucho tu ayuda, en este momento lo que necesitamos son manos para solucionar este problema.

-No puedo quedarme mucho tiempo, pero espero ser de ayuda.

-Claro que sí, el que estés aquí ya es mucha ganancia para nosotros. Deben venir cansados. Por favor Kook, muéstrale su habitación a Taehyung y luego vayan a comer algo.

-Por supuesto hermano- Jungkook hizo una reverencia la cual fue copiada por Tae, para luego salir del lugar.

Luego de instalarse y comer, la pareja se dirigió a lo que parecía ser un pequeño hospital, no era muy sofisticado, pero parecía tener lo básico. Caminaron por un pasillo hasta llegar a un amplio salón donde al parecer se encontraban los niños. Solo por precaución se vistieron con ropa quirúrgica estéril. Al entrar, el escenario fue desgarrador. Taehyung no pudo evitar soltar una lágrima. A lo largo de la sala había unas camillas con al menos 30 niños, ninguno parecía superar los 5 años. Los niños parecían medio idos, sus ojos se notaban apagados y sus pequeños cuerpos estaban muy delgados.

-Es realmente triste verlos así ¿no? Hemos hecho lo posible por estabilizarlos, pero siempre recaen. Como médico nunca había visto algo así. - Dijo el doctor Kim Sung Min dirigiéndose a Tae. Había acabado de entrar a la sala y no pudo evitar darse cuenta de la lágrima que Tae soltó. 

-Profesor Kim, es un gusto verlo- Tae se inclinó un poco para saludar a su mayor, ya lo conocía pues lo había visto algunas veces en la universidad.

-Qué bueno que aceptaste venir a nuestra manada. Estos cachorritos no son los únicos casos que tenemos, si me acompañas a la siguiente sala te mostraré los casos más críticos.

Al llegar a la otra habitación Tae pudo ver 5 incubadoras improvisadas, en ellas se encontraban acostados 5 cachorritos en su forma animal y se podía ver la dificultad que tenían para respirar,  pero lo que más le sorprendió fue ver que uno de los cachorros era un poco más grande que la palma de su mano, tenía por lo menos un par de semanas de nacido.

-Estos cachorros no han podido volver a su forma humana desde hace días, por lo que el medicamento que usamos en los otros niños no tiene un mayor efecto sobre ellos- Le informó el doctor kim.

Sin esperar más, Tae empezó a revisar a los cachorros, no sin antes sacar de su maleta algunos suministros médicos que traía con él. -Serán dos días bastante largos- Pensó.

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