Pasión Infernal

Explorando el Terreno

Aisha.

Nos encontramos todos juntos sentados fuera del instituto humano. Everette accedió venir conmigo, necesita asegurarse que la bestia Infernal no se encuentra oculta ahí.

Algo así como," explorar el terreno".

Shameena y Asmodeo se violan con la mirada a cada ocasión, sin embargo logran mantenerse separados. Al contrario, Vida y Muerte no se separan ni por un segundo, sonríen como si no hubiera mañana y se besan a cada cinco minutos.

Everette a estado muy tranquilo, ni muy alegre ni muy gruñón, no puedo quejarme ya que incluso a sido un poco caballeroso.

Siendo él un demonio, eso ya es un logro bastante grande.

- Hola.- alzo la mirada cuando escucho una voz masculina.

Mis ojos se topan con los de un humano, su piel es blanca y su cabello castaño claro está levemente despeinado, tiene una sonrisa muy bonita y sus ojos son café claro.

Le doy una mirada de reojo a Everette antes de decir algo.

- Hola.- respondo simple.

- Eres Camille, ¿cierto?- inquiere nervioso.

Claro que no.

- Supongo.- me encojo de hombros.

- Me preguntaba si te gustaría salir conmigo esta noche.-

Abro los ojos exageradamente, con gesto temeroso. Siento como todos posan su mirada en Everette, yo misma me siento aterrada de su reacción, así que actúo despreocupada.

- No, lo siento.- sonrío por compromiso.

-¿Puedo preguntar el porqué?- alza sus cejas incrédulo.

- No estoy interesada.- aseguro.

El humano rueda los ojos y se va del lugar, sin embargo la tensión no lo hace, Everette lo observa alejarse y luego de unos segundos sonríe psicópata.

Un intenso escalofrío se apodera de mí al observar esa sonrisa, es tan extraña que ni siquiera sé que pensar, luego sus ojos se posan en mi y guiña un ojo.

El alboroto a distancia logra llamar mi atención, me giro y veo a una pareja de humanos discutiendo, él le grita una y otra vez mientras ella solo llora descontroladamente, los humanos no tienen vergüenza alguna, hacen ese tipo de escándalos en medio de una multitud de estudiantes.

El chico golpea a la chica, dejándome impactada, ella solo lleva una mano a su mejilla sonrojada y se aleja corriendo, el chico parece dispuesto a seguirla.

De un segundo a otro se detiene con una expresión de pánico puro. Parpadeo confundida y poso mis ojos en los demonios junto a mi.

Siento como una extraña sensación se apodera de mi cuando veo el gesto de satisfacción que cada uno tiene, no sé en qué momento Vida se alejó, pero ahora solo los veo a ellos.

Muerte, Asmodeo, Shameena, y Everette, todos observan al humano fijamente con una expresión de diversión y satisfacción. El humano cae al suelo y varias personas acuden a su rescate, sus gritos comienzan a resonar en todo el lugar, la sonrisa de Everette es macabra.

Ellos están haciendo eso.

Y es en ese momento cuando caigo en cuenta de la realidad.

Son demonios, su naturaleza se basa en torturar a aquellos que condenan sus almas al Infierno, se alimentan del temor, sufrimiento, pensamientos oscuros y deseos indebidos, ellos son así.

¿Seré así algún día?

Luego de varios minutos, todos salen de su trance y actúan como si nada hubiera pasado. Everette me observa unos segundos y una sonrisa traviesa se posa en sus labios.