Grimes & Dixon [Daryl y tú]

8

Glenn manejaba, papá iba de copiloto y los demás veníamos en la parte de atrás.

- ¿Glenn y tú son pareja? - preguntó T-Dog y negué. - ¿amigos con derechos? - asentí.- genial... al menos ustedes se divierten.
- ¿qué Glenn y mi hija qué?
- se acuestan. - respondió Daryl limpiando sus flechas y lo pateé. - ¿acaso miento?
- si, mientes.
- ¿qué? ¿Tienes miedo de que papi te pegue? - se burló.
- no, si quiero tener vida sexual, la tendré.- dije y me volví a recargar en el hombro de T-Dog mientras papá me miraba desde su asiento. - ¿por qué los hombres pueden tener una vida sexual libre de... de que les digan cosas y las mujeres no? Eso es lo que me molesta.
- ¿entonces no eres virgen?
- papá...
- ¿alguna vez lo hiciste con Beck?
- ¡papá! - T-Dog y Daryl comenzaron a reír.- los odio.
- nadie te obligó a venir. - dijo Daryl sonriendo burlón. - solo espero que esté bien, es lo único que diré. - dijo cambiando el tema.
- te dije que está bien, sin que los cretinos lo alcancen, los únicos que cruzarán esa puerta seremos nosotros. - le dijo T-Dog.

Siempre me tienen que salir las cosas mal, no quería que mi papá se enterara.

- creo que tendremos que seguir a pie. - dijo Glenn y bajamos.
- ¿puedes o eres frágil? - me preguntó Daryl burlándose de nuevo.
- ¿no tienes otra cosa mejor que hacer?
- si, buscar a mi hermano. - me bajé pero se me dobló el pie y Daryl me sostuvo antes de caerme. - de nada.
- gracias. - fui detrás de él y después caminé rápido para ir junto a Glenn.
- no debí darte tan duro. - me susurró.
- ¿apenas te das cuenta? - sonrió y pasó su brazo por mis hombros, abrazándome

[...]

Llegamos a un edificio antes para poder armar un plan.

- vayamos por las armas.
- no, vamos primero por mi hermano.
- Glenn...
- Merle está más cerca, vamos por él primero.

Salimos y nos dirigimos al edificio donde se encontraba el Merle, subimos las escaleras, T-Dog rompió la cadena y salimos, no había nadie. Solo una caja de herramientas con las herramientas por todos lados, las esposas ensangrentadas y una mano.

- ¡no! ¡No! - comenzó a llorar. - lo perdí, lo perdí. - susurró varias veces y después le apuntó a T-Dog y papá le apuntó a Daryl.
- baja el arma. - bajó la ballesta y siguió llorando.
- Daryl... - acaricié su espalda, no me cae bien, ninguno de los dos pero se siente horrible. - ven... - lo abracé y él tardó en procesarlo hasta que decidió abrazarme devuelta.
- creo que es mejor ir ya por las armas.
- ustedes adelántense, nosotros ahorita bajamos. - asintieron, T-Dog recogió las herramientas, las puso en su caja y se fueron.
- hey, tranquilo, tal vez sigue vivo, podemos buscar abajo. - negó. - tu hermano puede ser muy idiota pero también puede ser fuerte y no creo que por cortarse la mano se muera. - se separó y se secó las lágrimas.- fue muy listo para librarse de las esposas pero no tanto como para no esperar que vinieran a buscarlo. - sacó una vandana, levantó la mano y la envolvió en la vandana.
- vámonos. - lo seguí y comenzó a buscar en el piso de abajo, los demás también hacían lo mismo.
- Daryl, mira. - le dijo Glenn apuntando hacia una estufa encendida, había sangre fresca y la ventana estaba rota.
- ¿ves? Está vivo. - asintió.
- vamos por las armas.
- hay que ver cómo iremos por ellas.
- tengo un plan. - dijo Glenn dibujando un croquis. - aquí está el tanque, estas son las armas, Daryl, ______ y yo estaremos aquí.- dijo señalando el callejón a una cuadra de las armas. - es el callejón donde los encontré, ¿recuerdan? - preguntó mirándonos a papá y a mí, ambos asentimos. - iré solo por las armas, Daryk y ______ me esperarán en el callejón.
- ¿mejor movilidad? - pregunté y asintió.
- no entendí. - dijo Daryl.
- yendo solo no atraeré tantos caminantes, seré silencioso y rápido. - asintió entendiendo. - bien..  T-Dog y Rick estarán aquí, a dos cuadras.
- ¿por qué?
- por si se me cruzan caminantes, no creo que pueda volver a donde estaba. - dijo.
- bien... ¿eso es todo? - asintió.
- oye.. ¿qué eras antes?
- repartidor de pizzas, ¿por qué?

Salimos del edificio, nos dividimos y fuimos a donde Glenn nos indicó.

- para ser chino tienes muchas agallas.
- soy coreano. - dijo y salió del callejón.
- novio coreano, bien por ti, ¿no? - rodé los ojos.
- es solo mi mejor amigo. - aclaré de nuevo y volteó hacia detrás mío, creí que era un caminante pero un chico de tal vez mi edad.
- ¡ayudenme! ¡Roberto! ¡ayudenme! - gritó y llegaron otros dos hombres, detrás de ellos llegó Glenn con las armas.

Le hice señas de que se fuera mientras forcejeaba con uno de lo hombres y el otro golpeaba a Daryl pero al parecer lo notó y volteó a ver a Glenn.

- tiene las armas. - dijo, le metí una patada y Daryl le disparó una flecha al otro en el trasero, llegó un auto y se bajaron más, me tomaron de la cintura y me cargaron.
- ¡Glenn! ¡Daryl! ¡ayudenme! ¡sueltenme!- me subieron a un auto.
- tranquila, no te haremos daño. - comencé a golpearlos.
- ¡déjenme!
- ¡tranquila! Sólo te queremos de rehén.
- y lo dice cómo si nada, que sinvergüenza.
- teniendo a nuestro chico y nosotros a ti, vendrán por ti y si no nos dan las armas...- volví a golpear a uno. - vaya que eres tosca.
- mi tío y mi papá son policías, obvio soy tosca, me enseñaron a defenderme.
- eres una rehén.
- cuatro contra uno, no se vale. - me crucé en de brazos mientras miraba hacia la ciudad.
- tal vez cuando lleguemos a nuestro hogar te guste.
- lo dudo.
- no estarás por mucho, no te preocupes.-  suspiré.

Sólo suspiré.