Mardi Grass || TERMINADA || +18

Capítulo 68

[ Red ]

Fue raro volver después de varias semanas. Nunca me pasó de tomar tanto tiempo fuera, así que sí, fue raro. No me costó, no es cómo si perdiera mis habilidades. Además, no está de más los billetes que gane esta noche solo por seguir los planes de Ryan.

Pero no puedo mentirles sobre el hecho de que estuve nerviosa cada minuto. Volteaba apenas veía una reacción torpe o un movimiento brusco. Me asustaba demasiado, estaba muy perseguida aun sabiendo que tenía agentes a mi alrededor cuidando mi espalda, y entre ellos a Black.

Y hablando de Roma... No hablamos en todo el día.

Vaya manera de pasar las últimas horas juntos.

Pero lo que sucedió esta mañana me dejó intranquila. Necesito hablar con él, quiero saber qué está pasando o porque carajos reaccionó así.

Un golpe en la puerta me trae de mis pensamientos.

─¿Estás lista? ─la voz de Black aparece como si hubiera sabido que estaba pensando en él.

─Todavía no ─digo, mientras tomo asiento para deshacerme de mis botas altas.

─Te espero aquí.

─Puedes pasar ¿lo sabes? No es como si hubiera algo que no hayas visto antes.

─Sí lo sé, solo no entré porque es un vestuario, normalmente hay más gente dentro.

─Estoy sola.

Levanto mi vista al escuchar la puerta abrirse. Primero introduce su cabeza para asegurarse que mis palabras sean ciertas, y luego al darse cuenta de que en verdad estoy sola, termina de entrar.

─¿No me creías?

─No pierdo nada comprobándolo.

Sentada en un largo banco de madera, asiento con la cabeza y vuelvo a mis botas.

─¿Y qué tal tu regreso? ─escucho como su voz empieza a acercarse a mí, igual que su sombra en la habitación.

─No estuvo tan mal.

─No me digas que te hicieron bullying ─bromea.

─¿Quiénes? ¿Las reemplazo?

─No suena muy bien decirles así.

─¿Por qué? Si esa es la verdad, son el reemplazo.

─Tal vez luego de esto dejen de ser reemplazos y compartan el lugar juntas.

─Eso nunca pasará. Estás flacuchas no nos llegan ni a los talones Black, ni siquiera de meseras podrían quedar.

─Eres muy mala.

─No soy mala, soy realista. ¿O acaso me equivoco?

─No lo sé. La experta eres tú.

─¿Vas a decirme que te causaron algo cuando las viste?

─No voy a responder a eso Red.

Revoleo mis ojos.

─Ambos sabemos que las viste.

─En realidad estaba demasiado ocupado perdiéndome en otra señorita.

─¿Enserio? Puaj ─hago un pequeño gesto de asco.

─Me refería a ti, y no hay necesidad de hacer gestos de asco. No son mujeres horribles Red, sólo que no son tus amigas y por eso las miras así.

─Eso no es cierto ─su mirada seria atraviesa la mía haciéndome ceder un poco─ Bueno, tal vez un poco.