[ Red ]
Me acerco un poco más para ver dónde carajos se esconde, pero es ahí cuando mis ojos se paralizan ante lo que tengo frente de mí.
–Es... es hermoso –suspiro, perdida en su obra de arte.
Los colores son hipnotizantes, y la figura de aquella mujer también.
Es su cuadro excluido, su pintura abandonada.
Mi ceño fruncido se suaviza por unos segundos, igual que todo mi cuerpo que prendía en llamas.
–Lo terminaste –admito sin creerlo, un tanto orgullosa de él.
–Lo terminé –confirma también sin poder creerlo, regalándome esa jodida sonrisa que me hace perder la cabeza.
Maldita sea, me resulta hermoso hasta cuándo lo único que quiero es arrancarle los ojos.
–¡Espera! –regaño a mi propio cerebro confundido. Pestañeo un par de veces y vuelvo a recordar el motivo por el que estaba aquí–. Enojada Red, recuerda.
–No sé en qué momento, pero lo terminé –dice él, continuando con el tema de conversación.
–Escucha una cosa Black–. Termino con su emoción.
Confundido, lleva una mano a su barbilla y me observa.
Sin camiseta, tan sólo sus jeans. Flexiona su brazo, su bíceps sobresaliendo más de lo normal. Su pecho y abdomen al descubierto, su piel desnuda detiene mi lengua.
¿Qué estaba diciendo?
Sus ojos claros me miran desafiantes. Estoy parada frente a él, hipnotizada por su encanto natural.
–No puedo concentrarme. Así no puedo hacerlo –me repito, y desvío mi mirada bruscamente hacia el costado.
–¿Qué pasó? –pregunta desorientado al notar que dejé de admirarlo como tanto le gusta.
–Cúbrete–. Arrojo a su cabeza el toallón que colgaba de una silla a mi lado.
–¿Qué? ¿Por qué?
–No puedo concentrarme así.
Miro hacía el reloj de la pared, sin salir de mi papel.
–Estas enojada Red. Necesitas que te escuche –me repito, convenciéndome de que estoy haciendo lo correcto.
Él ríe y se pone de pie, pero en vez de cubrir su cuerpo como le pedí, se cruza de brazos ante mí.
–¿No lo harás?
Inevitablemente bajo la vista hacia él, para concentrarme otra vez en sus abdominales perfectos.
–Estoy en mi casa, puedo vestir cómo quiera–. Desafiante, se encoge de hombros.
–Cómo tú quieras–. Enfadada volteo, dándole mi espalda y cruzando mis brazos.
–¿Me darás la espalda?
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Mardi Grass || TERMINADA || +18
AksiFiestas, deseos y éxtasis. Asi es la vida de Red, una stripper de Nueva Orleans quién conocerá a alguien que cambiará su vida por completo. [+18] ✓Primer libro de la saga: Lo cambias todo. | SINOPSIS en los capítulos | Está expresamente prohibido co...