Cap.34 "Juntos hasta el final".

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—¡Noel! ¡Quédate quieto! —le gritó Cato, sosteniendo su brazo con dificultad.

—¡No! ¡Déjenme ir! ¡Iré a Greenwood y me encerraré en el loquero por el resto de mi vida! —chilló mientras Augusto revoleaba los ojos, tirando de su brazo.

—¿Qué mierda está pasando? —gimió Tessa, al ver que podía curarse las heridas que le habían quedado de cuando asesinamos a los reclutas de Reynaldo.

—No entiendo nada. ¿Por qué tenemos magia? No se supone que tengamos magia —habló Irina mientras yo no podía dejar de pensar en que ya había tenido visiones.

Noel seguía forcejando, intentando escaparse de sus dos hermanos que tironeaban de sus brazos como si estuviese loco. Lo oíamos gritando cosas irracionales mientras el resto intentábamos encontrar una explicación lógica.

—¡Noel, por Dios! ¡Basta! —le espetó Cato, tironeando de su camiseta y logrando que cayera sentado en el suelo—. Huir no te servirá de nada, tenemos que pensar una explicación.

—Esto no puede estar pasando —habló Irina tomándose la cabeza con las manos y caminando de un lado al otro.

La lluvia comenzó a cesar un poco, se convirtió en una pequeña llovizna constante, pero de igual forma ya estábamos todos empapados. Observé a Nathan, esperando que estuviese pensando en lo mismo que yo. En lo que hablamos luego de la batalla con los reclutas de Reynaldo. Sobre mi visión y si era posible volver a tener poderes luego del ritual. Pero su mente parecía ida, sus ojos clavados en el suelo como si pensara en algo y solo se movía su pecho por su respiración.

—Nathan, ¿qué sucede? —le preguntó Cato, que notó lo mismo que yo.

—Leí algo sobre esto, pero no creí que fuese posible —respondió él, levantando la vista hacia su hermano.

Augusto y Ulises se dieron una mirada y Noel dejó de forcejear para observarlo. Nathan me dio una mirada y allí en sus ojos pude ver de qué se trataba, era sobre eso que hablamos la noche anterior. Si era posible que el tiempo nos alcance y desaparezcamos, porque este no era nuestro tiempo real.

Racionalmente, no, no debería ser así. Mágicamente... no quieres saber la respuesta.

Mágicamente si, era posible que eso sucediera. Y Nathan estaba intentando decir, allí frente a todos sus hermanos, que podía estar pasando.

—Ay, mierda —musité cuando entendí a qué se refería.

Irina al igual que Tessa pasaron su mirada por nosotros dos, intentando entender de qué hablábamos con nuestros ojos.

—Bueno, ya. Déjense de suspenso y hablen —pidió Noel, levantándose del suelo y zafándose de ambos de mala gana.

Ulises lo soltó mientras parpadeaba, queriendo entender las palabras de Nathan pero Augusto le dio una mirada molesta, casi diciéndole "¿así agradeces que evitemos que te internes en un psiquiátrico?".

—Hemos vuelto muchas veces al pasado. Muchas veces a distintos tiempos del mismo año. Y casi hemos estado más aquí en el 2019 que en el 2022....

—¿Y? —insistió Ulises, queriendo entender.

—El tiempo nos está tomando como si el pasado fuese nuestro presente. Estar tanto aquí ha hecho que la magia crea que es nuestro lugar —explicó con sus palabras, lo más tranquilo que pudo para que todos entendieran.

—Nos estamos volviendo parte de este tiempo —entendió Cato en un susurro—. La magia cree que este es nuestro presente. Que nuestro pasado es nuestro presente.

Controversia (Saga completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora